Sobrarbe

#contraladespoblación

Senderos para dinamizar el territorio y fijar población

Zona Zero Pirineos ha recibido la Medalla al Mérito Social del Gobierno de Aragón con un proyecto vertebrador y sostenible

Equipo de limpieza de Zona Zero en la comarca de Sobrarbe.
Equipo de limpieza de Zona Zero en la comarca de Sobrarbe.
Zona Zero

RECUPERAR y poner en valor toda una red de senderos tradicionales, pero también, convertir Sobrarbe en un referente de la BTT y el “enduro” y fijar población. Todo eso es lo que ha conseguido, en una década, Zona Zero Pirineos, la asociación sin ánimo de lucro reconocida con la Medalla al Mérito Social del Gobierno de Aragón.

Forma parte además de la marca de destino turístico de bicicleta MTB Kingdoms Pyrenees, presentada recientemente y en la que se une con los destinos para practicar bicicleta de Puro Pirineo (Valle de Benasque), Espacio BTT Alto Gállego, B-Guara y Reino de los Mallos Bike, como parte del mayor dominio ciclable a nivel nacional y uno de los más importantes de Europa. “Las redes de senderos tradicionales son sobre todo un recurso estratégico de primer nivel”, afirma Rafael Bergua, uno de los fundadores de Zona Zero Pirineos. Como señala, en Sobrarbe, esos “senderos recuperados” -gracias en gran medida al trabajo altruista de vecinos y voluntarios- poseen también una gran riqueza patrimonial. “Hay fuentes, hay muros, hay ermitas... Si lo pensamos un poco, era casi de sentido común que pusiéramos en valor un bien que es público, que ya estaba en el territorio y que solamente, por decirlo de alguna manera, había que ‘desenvolver’”, asegura.

Ángel Chéliz marcando la ruta de los Castillos de Samitier.
Ángel Chéliz marcando la ruta de los Castillos de Samitier.
Zona Zero

Como resalta Bergua, los turistas hallarán gracias a esta iniciativa unos recorridos “llenos de rincones y de sitios increíbles”. El visitante puede encontrar así desde rutas oficiales de “enduro” (ZZ), hasta llamadas “ligth y familiares” (ZL), pasando por las “rutas especiales de enduro sin balizar” (ZE) o de “cicloalpinismo” (ZA). Pero también una completa oferta de rutas senderistas y otras actividades, como barranquismo, observación de aves o actividades culturales, además de alojamientos, bares, restaurantes, comercios... que implican a todo el territorio.

Para lograr toda esta red de senderos renovados, no ha sido necesario “gastar muchos recursos económicos, porque lo que teníamos ya era muy grande”.

Así, es muchísimo el interés que generan entre los visitantes estas redes naturales. “Estamos hablando de un porcentaje de consultas en las oficinas de turismo altísimo, del 70, 75 u 80 % de las que se realizan, tanto en Aínsa, como en Torla, como en toda la comarca de Sobrarbe”, asegura Bergua. No basta, sin embargo, solo con recuperar estos caminos. “También hay que promocionarlos, para que no vuelvan a caer en el olvido. Y hay que mantenerlos y convivir en ellos”. Una “cuarta pata” que, resulta, “fundamental”. Y es que, como asegura Bergua, “no se trata solamente de convivir con turistas, cazadores, ciclistas, senderistas o con gente que va a ver patrimonio o naturaleza. Hay ganaderos y agricultores que también necesitan estos senderos”, insiste.

Señal de una de las rutas de Zona Zero Pirineos.
Señal de una de las rutas de Zona Zero Pirineos.
Zona Zero

Facilitar la convivencia

Para facilitar esa convivencia, ofrecen la aplicación Z Trails, que informa en tiempo real dónde se está cazando, qué rutas se pueden practicar en cada momento o si ha surgido alguna eventualidad. Se trata de una iniciativa avalada por la Consejería de Desarrollo Rural del Gobierno de Aragón, la Federación de Caza de Aragón, la Federación Aragonesa de Montaña y el mundo de la bicicleta.

Por otra parte, medir la repercusión económica de esta red de senderos resulta complicado, aunque puede calcularse entre 70.000 y 80.000 pernoctaciones vinculadas cada año con este bien natural. “Zona Zero es algo más que una asociación empresarial con un centenar de miembros, es también un club deportivo con 250 socios y toda la gente que en un momento dado colabora y echa una mano”, asegura su portavoz. “Es un colectivo, un movimiento social y empresarial que aboga por recuperar un patrimonio de todos, que es público y que nos enriquece a todos, generando economía, salud, bienestar y emponderamiento de la gente del territorio”, añade.

Bergua resalta así, por todo ello, que la Medalla al Mérito Social, “no se hubiera logrado sin la ayuda de los ayuntamientos, de la comarca, de los voluntarios, de los cazadores, de los ganaderos, de los agricultores...”.