Un vecino de La Fueva procesado por agresión sexual continuada a seis menores

El Juzgado de Boltaña ha dictado auto de procesamiento contra un vecino del municipio de La Fueva, como presunto autor de los delitos de agresión sexual y abusos continuados. El hombre de de 57 años, separado de su primera mujer y padre, está en libertad pero tiene prohibido entrar en la comarca del Sobrarbe, salir del país y acercarse a menos de 500 metros de las víctimas. Asimismo, dado el número de posibles víctimas, la edad de las menores y los posibles daños psicológicos, deberá presentar una fianza de 120.000 euros para asegurar posibles indemnizaciones. Dichos delitos están castigados incluso con penas de prisión de hasta 12 años.

Una de las víctimas cuenta en la actualidad con 13 años de edad. Un mes antes del inicio de las presentes actuaciones, en abril de 2021, fue ingresada en el Hospital de Barbastro con un cuadro grave de desnutrición, momento en el que se destaparon los abusos. Según el auto judicial, los vecinos del pueblo lo consideraban amable y con buen trato con los menores. Tenía contacto con la niña, como con otros críos del pueblo, sobre todo en verano, ya que los llevaba a ver jabalíes por la noche o a dar una vuelta con su tractor.

Respecto a otras cinco, una de ellas ha relatado que con solo 13 años les tocaba el culo o les metía la mano por debajo de la camiseta. Otra, que entre los 6 y los 13 años, sufrió los tocamientos de forma diaria todos los veranos: le acariciaba las nalgas, el pecho o la vagina. Cesaron cuando unos niños, testigos de los hechos, lo contaron a sus padres y no le dejaron ir más con él. Entonces ella lo negó porque era el mejor amigo de su padre.

A la vista de lo expuesto, se concluye en esta fase de instrucción, que los hechos investigados denunciados son indiciariamente veraces. Las víctimas han sido numerosas y la relación entre las mismas en su mayoría, era inexistente o de mera vecindad, siendo además de diversas edades. Por tanto, las denuncias no parecen tener motivos espurios.

En la documentación médica obrante en autos y el Informe del Servicio de Psiquiatría del Hospital Clínico Lozano Blesa, se indica que el posible abuso sexual sufrido por la primera menor puede ser una de las situaciones desencadenantes que propiciaran que se aislara y no quisiera alimentarse ni desarrollarse, conllevándole a la situación médica en la que se encontraba, con graves secuelas psicológicas.