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Aínsa celebrará este sábado una nueva edición de su 'Punchacubas'

Esta Feria del Vino Artesano conmemora cada año el oficio de vinatero y la elaboración casera de esta bebida en la comarca de Sobrarbe

La animada celebración ha regresado a la plaza de la localidad.
La animada celebración ha regresado a la plaza de la localidad.
S. E.

La localidad oscense de Aínsa ultima los preparativos para celebrará este sábado, 17 de diciembre, una nueva edición de 'Punchacubas', la Feria del Vino Artesano que cada año conmemora el oficio de vinatero y la elaboración casera de esta bebida en la comarca de Sobrarbe.

Antiguamente era habitual que, tras la cosecha, las casas dedicadas a la vendimia dieran a probar a sus vecinos el resultado. La iniciativa del 'Punchacubas' pretende rescatar de alguna forma esa costumbre ancestral y elegir los mejores vinos de la temporada, votados por el público asistente, ha informado en una nota de prensa el Ayuntamiento de Aínsa.

El acto festivo se inaugura este sábado a mediodía con el encendido de la hoguera en el centro de la Plaza Mayor y la preparación y degustación del cocido de anís. Mientras que la cata de vinos está programada a las 18.00 horas. En este evento, se dará a probar a los asistentes los vinos producidos en las casas sobrarbenses que aún siguen dedicándose a esta tarea.

Posteriormente, a las 20.00 horas, se dará a conocer el nombre del galardonado con el Jarro de Honor, premio que busca reconocer la trayectoria como productor de vino a algún vecino de la comarca.

Los Músicos del País, procedentes del Valle de Chistau, volverán a amenizar una jornada que el año pasado logró congregar a medio millar de personas en el casco antiguo.

El evento ha sido organizado por el Ayuntamiento de Aínsa-Sobrarbe, y cuenta con el apoyo de la Asociación de Vinateros de Sobrarbe, la Asociación de Mujeres El Eco.

En 2021 participaron 33 productores procedentes de una quincena de localidades, y desde la organización esperan que la participación este año sea similar. En esta ocasión, se expondrán las dos prensas de vino de la Plaza Mayor.

La fiesta se ha convertido en una seña de identidad que da a conocer el oficio ancestral de vinatero prácticamente desaparecido como actividad económica en la zona, aunque en algunas casas sigan elaborándose vinos para consumo propio.