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SOMONTANO - JUDICATURA

El barbastrense Gonzalo Marco Ariño obtiene la nota más alta de España en las oposiciones a juez

La puntación total de los tres exámenes orales fue de 93,99 puntos sobre 100 y la más alta de todos los aspirantes

El barbastrense Gonzalo Marco Ariño obtiene la nota más alta de España en las oposiciones a juez
El barbastrense Gonzalo Marco Ariño obtiene la nota más alta de España en las oposiciones a juez
Á. H.

BARBASTRO.- El barbastrense Gonzalo Marco Ariño, de 28 años, ingresa en la Carrera Judicial en España con el número 1 tras superar una oposición libre y un curso teórico y práctico de selección realizado en la Escuela judicial. La puntación total de los tres exámenes orales fue de 93,99 puntos sobre 100 y la más alta de todos los aspirantes. Gonzalo fue uno de las 4.500 personas de toda España que se presentaron en la primera fase y pasaron 1.500; en la segunda pasaron 570 y el última criba, 284 personas que obtuvieron la plaza en la promoción número 71 de Jueces.

El proceso comenzó el 8 de octubre de 2019 y los dos siguientes, orales, ante el Tribunal Supremo fueron el 14 de febrero y el 21 de octubre de 2020. A partir de enero de 2021 entrará en la Escuela Judicial de Barcelona si la situación sanitaria lo permite para realizar un curso teórico-práctico durante 10 meses y después comenzará un período de prácticas tuteladas con duración mínima de cuatro meses.

"En esta fase se ejercen funciones de auxilio y colaboración junto a los titulares de los órganos donde se desarrollan las prácticas y se va rotando por todos los órdenes jurisdiccionales. Una vez finalizado se procede a la entrega de despachos y se elige el primer destino por orden de nota". La "movilidad" en los primeros años de la carrera judicial es elevada.

Disciplina y trabajo con dureza son el denominador común según explica Gonzalo, "la dedicación exclusiva son 10 horas diarias de estudio durante seis días a la semana, uno de descanso y 2 semanas de vacaciones al año. Los meses y semanas previas al examen hasta 12 o 13 horas de estudio diario. Ahora estoy muy contento y satisfecho, como es lógico, pero han sido cuatro años de intensidad para preparar las oposiciones". La media normal son cinco según datos del Consejo General del Poder Judicial.

"Así que ha sido necesario hincar los codos y dedicar mi tiempo, casi por completo, a los estudios. Tienes que dejar cosas para dedicarte a los libros. En el tiempo que duró la cuarentena me concentré en Barbastro para aprovechar el tiempo al máximo. Ahora, cuando conoces los resultados te quedas satisfecho".

Explica que "el temario se compone de 325 temas y la oposición se divide en tres ejercicios, eliminatorios, el primero es un examen tipo test de 100 preguntas, la nota de corte se fijó en 70,70 puntos y en el examen obtuve 87,69 puntos de 100. Los dos ejercicios restantes en formato de exposición oral ante el Tribunal Calificador fueron sobre cinco temas extraídos a suerte, se dispone de 60 minutos en cada prueba oral y no se puede dedicar más de 15 minutos por tema. En el primero obtuve 46,49 puntos de 50, en el segundo 47,50 de 50 y la suma total fue de 93,99 puntos de 100, la más alta de todos los aspirantes".

Destaca el papel de los magistrados José Manuel Regadera, Pablo Llarena y Gema Espinosa, "los preparadores son esenciales porque te planifican el estudio, corrigen tanto el fondo como la forma en la exposición de los temas que haces con ellos cada semana. Además, se convierten en verdaderos psicólogos en los momentos más duros de la oposición".

"LA DEMANDA CIVIL DE LOS BIENES ES UN CASI MUY ATRACTIVO"

Respecto a su elección por la carrera judicial, "me llamó la atención y despertó interés desde el principio y en cuestión de 24 horas tomé la decisión entre juez o fiscal, en mi familia no hay precedentes". No conoce a Carlos Lobón, magistrado del Juzgado de Instrucción número 1 de Barbastro, pero ha seguido su trayectoria en la demanda por la devolución de 111 obras y bienes al Obispado de Barbastro-Monzón, "es una caso muy interesante y atractivo para un juez".

Al mismo tiempo, reconoce que "Barbastro es una plaza apetecible" aunque es consciente de que no puede elegirla. Se considera "un alumno de la escuela pública porque comencé en La Merced y seguí en el IES Hermanos Argensola". Gonzalo conoce al abogado barbastrense y catedrático Manuel Ollé con quien coincidió en Madrid pero no tiene al magistrado Jesús Broto, una de las referencias locales en la Judicatura que reside en Madrid. De momento, disfruta de los resultados propios de un trabajo metódico, constante y disciplinado.