Rimas de fin de año

Si la memoria no falla, ésta era la cuarta vez que el grupo turolense Chocabeat actuaba en la capital oscense. Hace unos años lo hicieron en el Cubitos. El año pasado participaron en la edición "Palabras" del festival Periferias, y este año actuaron también en el Garrampa Pop. Y ahora, en medio de todo el revuelo navideño, llegaban al bar La Estrella para ponerlo patas arriba.

Chocabeat es un grupo en continua progresión, y hay que reconocer que en cada nueva visita a Huesca ha demostrado estar cada vez en mejor forma.

Con el histórico del hip hop oscense Symon Essence en sus filas, Chocabeat siguen un poco la estela de los grupos clásicos del rap nacional como CPV o Violadores del Verso, con una poderosa alineación de MCs (cuatro en esta ocasión), a los que se unen un guitarrista y un disc-jockey.

Este verano el grupo editó su último EP, Pimienta negra. Pero lejos de agotar su repertorio de directo con los temas que se incluyen en sus discos, Chocabeat optan por introducir un gran número de temas nuevos o inéditos.

Tras interpretar en la primera parte de su actuación temas como Moscardón, En mi bolsillo, Flowtando, Factótum (de su primer trabajo, La última copa de HankChinaski) o Momento Kodak, en los que plasman con inspirado flow y con contundencia su cotidianidad y su compromiso a través de elaboradas rimas de pura poesía urbana, invitaron al escenario al oscense Yeray Ruiz, que aportó humeantes acentos jamaicanos y un estilo a veces más próximo al raggamuffin y el dancehall, interpretando los temas Smokin´ Rap y The Game.

Después, el DJ y productor del grupo, Pablo Scratch, se lució con la técnica del human beatbox y acompañó el vibrante tema Freestylers. Ya enfilando la recta final, sonaron el dinámico Bluesbeatswimswim y Lomocaster, tema extraído de su último EP Pimienta negra. Y tras un falso final en el que sonó el Everybody ¡de los Backstreet Boys! para regocijo del personal, se despidieron en clave metalera con Hardhop, junto a Yeray Ruiz, ante el entregado público que abarrotaba el bar La Estrella. Lo dicho, cada vez mejores.