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PROYECCIÓN

Luis Olano: “Sender Barayón es un personaje absolutamente impresionante, es especial”

LA DPH ha acogido el preestreno del documental relata la vida de un testigo privilegiado y activo del siglo XX

Luis Olano: “Sender Barayón es un personaje absolutamente impresionante, es especial”
Luis Olano: “Sender Barayón es un personaje absolutamente impresionante, es especial”
D.A.

HUESCA.- De niño de la guerra a gurú de la contracultura. Ramón Sender Barayón nació en Madrid el 29 de octubre de 1934. Exiliado a los EEUU siendo un niño, el hijo de Ramón J. Sender y Amparo Barayón acabó como pionero de la música electrónica, el vanguardismo contracultural y el hippismo en la California de los años 60. Luis Olano muestra a este "personaje impresionante", como le define, en el largometraje documental Sender Barayón, Viaje hacia la luz, que se ha preestrenado este jueves en la Diputación de Huesca, coincidiendo con el aniversario del autor de Chalamera.

Olano, que ha contado con una de las ayudas de investigación del Instituto de Estudios Altoaragoneses para este trabajo, ha participado tras la proyección en un coloquio en el que ha estado acompañado por Marina Montoto, antropóloga y socióloga especialista en memoria histórica, Pablo Sánchez León, historiador y editor de Muerte en Zamora, libro de Sender Barayón que acaba de ser reeditado en España, y Luis Gómez Caldú, coordinador del Centro de Estudios Senderianos del IEA.

Luis Olano (Leningrado, 1986), es nieto de un "niño de la guerra". Su abuelo se exilio a Rusia, y conocer al hijo de Sender le sirvió quitarse la espina de contar la historia del siglo XX desde la España de la Guerra Civil, la represión y el exilio, hasta la soleada California de la contracultura, los años dorados del rock, la psicodelia y los hippies, y hacerlo de la mano de Ramón Sender Barayón.

Para Luis Olano conocerlo fue todo un descubrimiento. Contacto con él en un viaje a San Francisco en 2014 a instancia de su padrasto, el periodista Germán Sánchez, que había investigado sobre Sender y que vio en su hijo la oportunidad de "retomar la figura del padre desde la visión que nos falta aquí: su vida en el exhilio", indicó el director del documental a este periódico.

Lo localizó a través de su página web. Quedaron, hablaron, "e inmediatamente informe a Germán de que el personaje que me había topado era absolutamente impresionante. Es un contador de historias casi único y un testigo del siglo XX que participó de forma activa en muchos momentos históricos de gran relevancia: el nacimiento de la contracultura en EEUU, la llegada del movimiento hippie, la protesta contra Vietnam... y, enseguida vi la necesidad de hacer una película sobre él".

A su regreso a España, junto a Germán Sánchez, preparon una "batería de preguntas para poder volver", algo que hizo junto a un amigo en 2016, rondando una entrevista que sirvió de base para su documental, en el que hay "una parte personal. "Mi abuelo, que era de Bilbao, emigró en el 37, con 11 años, en un barco a Rusia, y encontrarme ante un octogenario que había vivido la historia del exilio, para mí ya tenía un significado especial".

Entre Luis Olona y Ramón Sender Barayón surgió una chispa, "un enamoramiento", que en "su caso hacía mí fue el respeto y generosidad de contar esa historia a un joven de tan lejos que estaba interesado en hablar de cosas de su vida", y en el caso del director, "establecer un diálogo con alguien que manejaba sus referencias culturales, las de los 60, y a la vez, las nuestras".

Reconoció que le resulba "algo chocante porque estabas sentado delante de un hippie octogenario, en su aspecto, que maneja el ordenador, autoedita sus libros, utiliza el photoshop, cromprime y manda archivos, sigue la prensa internacional y es activo en las redes sociales. Es una persona especial".

Es Ramón Sender Barayón es el que se refleja en el filme, pero también el que se enfrentó al trauma que supone la tragedia "de una madre fusilada sin juicio en Zamora, de un exilio, de vivir en una familia de adopción en EEUU...", y frente a todo eso "como su vida representa un continúo viaje, una búsqueda de una solución creativa, experimental..., y como encuentra una respuesta, desde el inconsciente, luminosa y vital".

Del viaje hacia la luz que ha realizado Sender Barayón han disfrutado los oscenses, que también han concoido algo más del libro que él escribió, Muerte en Zamora, un relato de esa búsqueda entre la memoria y la historia, que reconstruye de un modo sincero y poético un drama personal y simbólico de la represión franquista y sus secuelas en las generaciones siguientes, y en cuya nueva edición en castellano se incluye textos introductorios de Paul Preston y Helen Graham, además de un relato de Espinosa Maestre, sobre la vergüenza vivida por la familia a raíz de la publicación en la prensa local zamorana de artículos que denigraban la memoria de Amparo Barayón.