HUESCA.- El patrimonio rupestre parietal de Aragón ha quedado recogido en una completa publicación que reúne los hallazgos realizados en la Comunidad desde el primer descubrimiento de 1892 hasta el año 2010.

El libro Arte rupestre en Aragón, editado por la DGA, acaba de ver la luz coincidiendo con el veinte aniversario de la declaración del arte rupestre aragonés como Patrimonio Mundial por parte de la Unesco, dentro del Bien Arte rupestre del Arco Mediterráneo.

La obra fue presentada este jueves en el Museo de Huesca en un acto dedicado a Vicente Baldellou Martínez, quien fue director de esta espacio expositivo durante 40 años y uno de los máximos expertos en esta materia, ya fallecido, junto a Antonio Beltrán, para quien también hubo palabras de homenaje.

La directora del Museo de Huesca, Ana Armillas, abrió esta presentación recordando a Baldellou y acompañada por el director general de Cultura y Patrimonio del Gobierno de Aragón, Nacho Escuín, José María Rodanés, responsable de la coordinación científica de la publicación, y José Ignacio Royo, arqueólogo del Departamento y Experto en Arte Rupestre.

José María Rodanés manifestó que un libro de estas características es "muy complejo de configurar". "Lleva muchos años y hay que destacar también la voluntad política del inicio y culminación del mismo", valoró el experto, que añadió que en esta obra culminan muchos esfuerzos y un gran trabajo de selección de yacimientos. En concreto, la obra es un completo catálogo más de 400 páginas en las que se describen más de 160 enclaves con pinturas o grabados que abarcan desde las primeras manifestaciones artísticas del Paleolítico Superior, hasta los momentos finales de la Edad de los Metales. "Tenemos delante una obra muy elaborada. Nuestra idea era dar forma a un texto que podríamos situar en la Alta Divulgación. No hemos querido hacer una investigación sobre arte rupestre sino plasmar parte de lo que el territorio aragonés tiene, que es mucho", indicó.

Rodanés consideró que "lógicamente un libro de estas características está siempre inacabado porque prácticamente cuando sale a la calle la realidad y los nuevos descubrimientos ya le han superado".

Y aprovechó la ocasión para lanzar un llamamiento a las administraciones desde el que reclamó "una continuidad en la incorporación, en el tratamiento de estos yacimientos para ir teniendo siempre un registro actualizado científico y que incluya la bibliografía más reciente".

Por su parte, José Ignacio Royo manifestó que el catálogo Arte rupestre en Aragón recoge "el primer inventario de arte rupestre del Arco Mediterráneo".

En sus páginas, dijo, han participado muchísimas personas de forma altruista para recuperar un patrimonio que es la herencia más viva que nos han entregado las sociedades prehistóricas. Un legado absolutamente extraordinario".

Añadió que detrás de un solo yacimiento de los que figuran en el libro "hay años de trabajo de un equipo multidisciplinar y ahora el público va a poder disponer de una parte muy importante, aproximadamente la mitad de el patrimonio de arte rupestre que tenemos en Aragón".

En este sentido, Nacho Escuín anunció que el libro podrá descargarse próximamente a través de la página web del Centro del Libro de Aragón y desde la de Patrimonio Cultural de Aragón.

Escuín resaltó asimismo el papel de los parques culturales en la difusión de un gran patrimonio como es el legado de las sociedades prehistóricas, elemento de desarrollo y potenciación de las áreas rurales.