Cultura

47º EDICIÓN

El director y la guionista de "El Reino" conciben el guión como "un organismo vivo"

Rodrigo Sorogoyen e Isabel Peña han explicado en rueda de prensa cómo llevan a cabo su trabajo

El director y la guionista de "El Reino" conciben el guión como "un organismo vivo"
El director y la guionista de "El Reino" conciben el guión como "un organismo vivo"
R. G.

HUESCA.- El realizador Rodrigo Sorogoyen y la guionista Isabel Peña, colaboradores en la multipremiada película "El Reino", conciben el guión cinematográfico como un organismo vivo y abierto que puede verse sujeto a cambios durante el rodaje o el montaje de la producción si algo no funciona.

Así lo han explicado ambos en una comparecencia de prensa con motivo de la concesión a ambos del Premio Ciudad de Huesca Carlos Saura por parte de la organización del 47 Festival Internacional de Cine de Huesca y que recogerán esta noche de manos del propio realizador aragonés.

De una forma similar al proceso que han seguido para levantar desde hace años producciones reconocidas como "Stockholm", "Que Dios nos perdone", "El Reino" o el cortometraje nominado al Oscar "Madre", ambos se solapan en sus razonamientos antes de llegar a las mismas conclusiones sobre el trabajo cinematográfico.

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A partir de una primera idea, sensación o noticia de periódico, ha asegurado Isabel Peña, comienza un trabajo de semanas o meses de "hablar muchísimo" del tema, de los personajes y de la estructura en los que los apuntes y las libretas y no el ordenador son la principal herramienta de trabajo.

Finalizado este proceso, ha añadido, la elaboración del guión es dividida al cincuenta por ciento entre los dos, con un primer borrador, ha subrayado, que intercambian "hasta la saciedad" y en el que al final ya no recuerdan qué parte es de cada quien.

Ha admitido que cuanto más desacuerdo se produce entre ambos es mejor "porque eso significa que somos más exigentes y que intentamos ser lo más creativos posible".

Por su parte, Rodrigo Sorogoyen, también guionista, ha admitido que el guión siempre está "abierto" a cambios, proceso en el que él se ve más implicado que su compañera al responsabilizarse de "intentar poner en pie la película".

"Es obvio -ha añadido- que el guión está siempre abierto; lo difícil es no desviarse de la buena dirección y a veces, en el proceso de montaje puedes ver que una escena no sirve para nada a pesar de que en principio era buenísima, pero eso es lo fascinante".

Isabel Peña ha subrayado que "el guionista que piense que su trabajo ha acabado y es intocable el día que lo entrega, o es idiota o es un inexperto, porque el guión está siempre vivo y es precioso ver como se transforma en montaje".

En relación a este punto ha recordado que una escena de "El Reino" que ambos consideraban "fundamental" cayó en la sala de montaje. "Lo mejor que nos podía haber pasado", ha añadido.

También les ocurrió durante el proceso de rodaje de "Stockholm", en la que la escena más importante a su juicio, "la de las llaves", no estaba en el guión, pero Sorogoyen decidió confeccionarla en "un día y medio de pánico" porque le parecía que "todo estaba siendo muy liviano".

Sorogoyen, consciente que durante mucho tiempo la profesión de guionista estuvo "demasiado oculta y denostada" y alejada de la alfombra roja, asegura, sin embargo, que "sin un buen guión no hay una buena película, es imposible".

Ahora, ambos trabajan en la transformación en largometraje del corto "Madre", que prevén estrenar el próximo otoño y del que mostrarán en exclusiva durante el festival un fragmento de cinco minutos.

Respecto a la propuesta de desarrollar la idea original del cortometraje, la angustia de una madre al que su hijo llama desde la playa para decirle que su padre ha desaparecido, ha explicado que la idea del corto partió de una anécdota contada por un amigo respecto a los "treinta segundos" de angustia vividos realmente por una mujer que se había enfrentado a una situación similar, una situación que decidió "alargar de forma cruel" en su producción porque "es una de las peores cosas que le puede pasar a una madre".

Sin embargo, ha añadido, no se trata de un previsible 'thriller' después del "El Reino", sino de "una película de esperanza, un camino hacia la luz".