Cultura

EXPOSICIÓN

Dorian Wood: "Mi cuerpo es plataforma de diálogo conmigo y los demás"

Su obra visual se expone por primera vez en España

Dorian Wood: "Mi cuerpo es plataforma de diálogo conmigo y los demás"
Dorian Wood: "Mi cuerpo es plataforma de diálogo conmigo y los demás"
P.S.

HUESCA.- Dorian Wood expone por primera vez en España y lo hace en La Carbonería. Desde el 6 de marzo hasta el 25 de abril se pueden ver 60 dibujos, obra del artista, músico y performativo, que en los días previos a la inauguración en la galería oscense protagonizaba una serie de conciertos en Madrid con el homenaje a Chavela Vargas Xavela Lux Aeterna.

Cuando se observan sus dibujos desde lejos, "la línea es muy amable; cuando te acercas, comienzas a observar las perversiones, que todas tienen que ver con lo escatológico, con el cuerpo. Son autorretratos en los que pesa más el cuerpo que la cara", explica Joseba Acha, al frente del espacio expositivo.

Observar los dibujos expuestos en las paredes de La Carbonería es igual que adentrarse en las páginas de un diario. "Es una celebración de lo que es mi cuerpo. Mirando cada obra en un contexto de exposición, es un poco extraño, porque estamos hablando de una versión de un diario, una manera de preservar mi vida cotidiana a través de estas imágenes", explica Wood frente a sus obras.

Dibujos que Dorian Wood ha ido realizando en un contexto de conversación consigo mismo, con su cuerpo, que "sigue siendo una plataforma de diálogo no solo con los demás sino también para mí "misme" (evita definir el género). Reconozco que he hecho avances significativos en aceptar mi cuerpo como es, pero al llegar al final del día, "une" se siente muy vulnerable, y en ese procesar el día existe conflicto y existe una conversación interna. Intento relajarme y me propongo comunicar eso que a veces es conflicto, a veces conversación, a veces celebración".

Hablando sobre el modo, Wood tiende a la desglorificación del dolor en el arte. "Los artistas que mejor nos han impactado han sido los que más han sufrido y eso pertenece a una narrativa en la que se glorifica el trabajo y el sufrimiento. Me resulta algo muy sádico, pues estamos tomando el sufrimiento de una persona y poniéndolo en un pedestal, como si merecieran sufrir para que "nosotres" pudiéramos disfrutar de su obra".

De ahí que el dibujar órganos sexuales que entran y salen de bocas, persiguiendo cuerpos de tres cabezas; miembros entrando en cuerpos ajenos por orificios desacralizados o caca presentada como algo delicioso sea para Wood "algo sanador y liberador" por expresar "cosas que son prohibitivas, de las que no se habla (...) de una manera que es humorística, y que es correcta; reírse de lo absurdo que es hablar de la caca, ponerla en una imagen, contextualizarla en una manera positiva", explica, insistiendo al tiempo en que su intención "no es provocar, para nada", más bien invitar a las personas que proyecten lo que deseen sobre las obras.

Perversiones a base de boli y grafito, pequeños apuntes sobre tabúes, vergüenzas y preconceptos, que para Wood "ha sido una terapia necesaria para mi sobreviviencia".