Cultura

PANDEMIA DEL CORONAVIRUS

"Perversiones de la música popular del siglo XX", desde el balcón y al saxofón por Justo Bagüeste en Huesca

El músico interpreta una pieza cada día desde el balcón de su domicilio, en la calle Villahermosa, después de los aplausos de las 20 horas

"Perversiones de la música popular del siglo XX", desde el balcón y al saxofón por Justo Bagüeste en Huesca
"Perversiones de la música popular del siglo XX", desde el balcón y al saxofón por Justo Bagüeste en Huesca
C.L.

Justo Bagüeste sale todos los día a las 20 horas al balcón de su domicilio ubicado en el edificio que en sus bajos albergó el comercio Balaguer. Se le ve con su saxofón. Su salida al balcón de la calle Villahermosa se produce tras los aplausos que todos los días resuenan en apoyo y reconocimiento de las y los sanitarios, y del resto de profesionales que continúan en sus tareas intentando contener este disloque vital sobrevenido. "Empecé el lunes 16 y toqué Imagine, de John Lenon. Lo hice con cierto miramiento al terminar los aplausos al personal sanitario". Desde entonces, en los alrededores de la Plaza Luis López Allué y la Calle Villahermosa, seguro llegará hasta el vecindario de la calle Cuatro Reyes, han sonado The Sound of Silence. de Simon and Garfunkel; Hey Jude, de The Beatles; de The Shadow of your smile, de Johnny Mandel, o Please, Release Me, de Tom Jones.

La intervención dura lo que dura la pieza. Con eso es suficiente. La piezas que escoge son para Justo "perversiones de la música popular melancólica del repertorio estándar del siglo pasado, que es cuando empecé a escuchar e intentar reproducir emociones".

Bagüeste tenía previsto (todas teníamos algo previsto) un concierto presentación del último disco que grabó junto a Sus Saiz, en el Centro Cultural Manuel Benito Moliner durante la edición de Periferias 2016. Una degustación sonora del disco Inducing the Pleasure Dreams, que iba a tener lugar el próximo viernes, 27 de marzo, en La Confianza. Un maridaje nocturno "de música y otros manjares" que iba a contar además con las colaboraciones de los músicos Salvador Cored, Juanjo Javierre y Sandra Lanuza.

Por el momento Bagüeste se ha armado del saxofón, "que es mi instrumento principal y que siempre me ha acompañado en toda mi vida sonora", aunque no descarta, "si la situación se prolonga y siempre que sea aceptado por la vecindad -la cual de momento, dice Bagüeste, está encantada con las intervenciones vespertinas-, incorporaré algunos momentos creados en esta calle con alguien que ya no está con nosotros". El poeta Javier Carnicer, "Juntos hicimos los discos Lijas y Polar. Su hermana es una de las que sale a saludar todos los días".

Bagüeste agradece el hecho de poder tocar estas piezas populares. "Recuerdo una entrevista a Elvis, en la que decía: "Sé que mi vida a algunas personas les parece estúpida, pero me consuela y me hace feliz que, en los momentos de alegría y tristeza escuchan las canciones que yo había grabado y se sentían acompañados". Salvando las distancias, y como alguien que con menos o más acierto dedica su vida al agrado y acompañamiento de los demás, eso es lo que siento cada tarde y doy gracias por ser un poco útil".