Factoría Enclaves propone un viaje de Mozart a nuestros días

HUESCA.- El Festival de Música y Patrimonio "Enclaves"se inaugura este jueves con la actuación de Factoría Enclaves, que hará un repaso por la música clásica, romántica y contemporánea en la Catedral de Huesca (20:30 horas).

El espectáculo transitará desde las partituras del siglo XVIII a nuestros días, en un viaje de sonoridades más contemporáneas en las que instrumentos como el piano o el clarinete (propios del clasicismo) adquieren mayor protagonismo.

La formación está compuesta por músicos de gran prestigio que están repartidos por el territorio nacional e internacional, entre ellos, el violinista David Otto, que es también el director artístico de la propuesta.

Completan la banda Jorge Franco (tenor), Paloma Ortas (viola), Leire Antoñanzas (violonchelo), Andrés Otín (oboe), David Lobera (clarinete), Enrique Escartín (piano) y Victoria Crespo (actriz).

Organizado por la Comarca Hoya de Huesca en colaboración con el Ayuntamiento o la Diputación Provincial, el concierto cuenta con un aforo limitado de 120 personas, que accederán al recinto con las invitaciones que se pusieron a disposición del público en el Centro Cultural Manuel Benito Moliner en los últimos días.

EL PROGRAMA

El programa se titula Emergente, de Mozart a nuestros días. Lo que de la música emana e incluye obras del citado compositor, Schumann, Bartok, Tosti, Amargós o Connesson, además de una pieza escénica titulada Encantarias, de chelo y actriz, que se grabará en el claustro de la Catedral y que se incluirá en el producto audiovisual desarrollado por Rampa.

El concierto se concibe siguiendo el modelo de carta blanca en el que un colectivo de intérpretes modela distintos tipos de formación instrumental dando curso a un programa ecléctico que, a modo de miscelánea, seleccionan diferentes piezas de los siglos XVIII, XIX, XX y XXI que buscan transmitir sensaciones dispares y voces diversas en momentos de crisis.

Emergente, título de este concierto, tiene un doble valor. Por un lado, nos evoca lo que fluye hacia arriba y reflota, en un guiño a la sociedad que lucha por salir adelante y recuperarse, pero muy específicamente al mundo de la Cultura que se ha visto seriamente perjudicado y que, cuando se componía este proyecto, se situaba en un estado de inanición.

Sin embargo, también refiere a todo aquello que de la música emana, más allá del propio disfrute estético. La música es un generador de iniciativas y un dinamizador social.

El papel que ha desempeñado durante el estado de alarma es un claro ejemplo, pero este rol lo ha jugado a lo largo de la historia.