Cultura

MUSEO DE HISTORIA Y TRADICIÓN

El Museo Casa Paco, de Graus, abre las puertas a la modernización

La exposición reúne toda clase de utensilios y pequeño electrodoméstico

Asistentes a la inauguración observan la pieza más valiosa de la muestra, un antiguo telégrafo.
Asistentes a la inauguración observan la pieza más valiosa de la muestra, un antiguo telégrafo.
E.F.

El Museo de Historia y Tradición de Graus Casa Paco ha abierto las puertas de una nueva exposición temporal titulada La Modernización de la casa: Del fogón a la electricidad. El recorrido expositivo parte de los hornillos, los cazos y pucheros y continúa hacia los pequeños electrodomésticos, los aparatos para infusiones y café o los teléfonos hasta llegar a un telégrafo antiguo que se utilizó en Graus antes de la llegada de la electricidad, que es la pieza “estrella” de la exposición.

El calendario de un comercio de Graus de los años 60 es la base de esta muestra ya que, junto a los coloridos azulejos, retrata los primeros electrodomésticos. “Sirve de punto de partida e ilustra la exposición”, explicó el comisario, Eugenio López, quien aludió a la inclusión de la publicidad de la época que, como vehículo para llegar a las familias, se liga así al electrodoméstico. “Hemos preferido que sean electrodomésticos propios, que nos traigan recuerdos y nos identifiquemos. Y aunque parecen sencillos, más de un 30 por ciento de las piezas están catalogadas”, detalló.

López repasó, junto a las autoridades locales presididas por la alcaldesa, Gema Betorz, una muestra que parte del 26 marzo de 1895, cuando empieza a funcionar la Dinamo instalada en la calle Santa Bárbara y más de 600 bombillas se encienden en Graus. “Llegó la luz al mismo tiempo que en Huesca, a Benabarre, por ejemplo, tardaría 15 años. Y se hizo una sociedad abierta a todos: el que tenía dinero ponía 50 pesetas y el que no tenía una peseta y todo el mundo la disfrutó”, relató.

Hornillos de diferentes épocas que se pueden ver en el Museo Casa Paco graus
Hornillos de diferentes épocas que se pueden ver en el Museo Casa Paco.
E.F.

El primer ámbito se centra en “calentar alimentos” con los primeros hornillos a petróleo, infiernillos eléctricos de los años 50, hornillos de alcohol, de pastillas de meta o de gas. A continuación, la muestra abunda en “cocinar los alimentos” con cazos y pucheros de fundición y las primeras ollas a presión. Para “preparar” los alimentos, muestra algunas de las primeras minipimers, batidoras, cazos eléctricos, tostadores, yogurteras o básculas de pesar alimentos. “Mejorando la ropa” muestra a continuación una colección de planchas, la mayoría de 125 voltios. Para “preparar infusiones” incluye molinillos de café, cafeteras, hornillos o cafeteras y cucharillas eléctricas. En el ámbito de la comunicación, presenta la evolución del teléfono, antes de centrarse en la pieza clave: el telégrafo. El modelo, que se acompaña de un generador de corriente, es la “joya” de esta muestra, donde también hay afeitadoras, los primeros secadores de pelo, estufas o ventiladores.