Rosa Tabernero: “Tenemos que volver a Andersen por ser el autor de lo diferente”

La profesora del Campus de Huesca de la Universidad de Zaragoza y directora del Máster propio de Lectura, Libros y Literatura Infantil y Juvenil, Rosa Tabernero, inauguró este miércoles, con textos de Hans Christian Andersen, los actos presenciales del ciclo Cuánto cuento, en el Centro Cívico Santiago Escartín Otín, que organizan las bibliotecas municipales de Huesca durante este mes de abril con motivo de la celebración del Día Internacional de Libro infantil y juvenil, el pasado viernes.

Cuentos como El patito feo, La sirenita o La reina de las nieves protagonizaron esta cata literaria coordinada por las maestras del colegio Pío XII María José Lasaosa y Felisa Montejano. Una cata que quedó a cargo del público, ya que fueron ellos, los lectores, los encargados de elegir las historias para este recital.

Tabernero presentó el acto y habló sobre la figura de Andersen, al que tildó de “uno de los grandes de la literatura”, e hizo hincapié en que “merece la pena leer sus libros”. En este aspecto, comentó que había sido “una buenísima elección” porque “ahora que tanto hablamos de diversidad tenemos que volver una y otra vez a Andersen, que es el autor de lo diferente”.

La experta en literatura infantil explicó a este periódico, momentos antes del recital, que “Andersen proyecta en todos sus personajes la sensación de exclusión que él mismo tenía”. Añadió que es fundamental la idea que proyecta de que el concepto de identidad depende de nosotros mismos, es decir, “la sociedad nos propone retos que vamos a resolver con la fuerza que tenemos dentro, porque todos somos seres especiales y diferentes y dependerá de las estrategias que elijamos para sobrevivir o integrarnos”.

Tabernero propuso la lectura de La princesa y el guisante porque “es el que más me impresiona y creo que todo el mundo lo debe conocer porque contiene unas ideas que ayudan en la vida”.

Sobre cómo han llegado a nuestros días estos cuentos y sus variables, comentó que “Andersen no es muy proclive a los finales felices, camina siempre entre dos mundos, la realidad y la ficción, la pobreza y la riqueza, la inclusión y la exclusión, esa es su vida y su narrativa”, pero “algunas adaptaciones como la que hizo Disney de La sirenita, que tiene un concepto de infancia más dependiente y menos consistente, hacen que se pierda completamente el sentido inicial”, subrayó la experta.

Por otro lado, calificó este recital como especial por poder encontrase físicamente alrededor de un cuento ya que “así se devuelve a la literatura infantil su fin originario, que es tejer redes en las comunidades”.