Cultura

entrevista

Marta López Brioso: “Algunas son muy duras... Son fotografías espeluznantes”

La investigadora valora las imágenes de la Guerra Civil de los Claretianos de Barbastro

Marta López Beriso con una de las fotos del Museo de los Mártires Claretianos.
Marta López Beriso con una de las fotos del Museo de los Mártires Claretianos.
Ángel Huguet

La colección de 200 fotos inéditas, en blanco y negro, sobre la Guerra Civil, numeradas y documentadas con textos en inglés y francés, firmadas con el pseudónimo Claudek, han despertado el interés de Marta López Beriso, doctora, profesora, investigadora, gestora en historia del arte y la fotografía en museos, archivos y universidades. En cuanto ha sido posible, ha viajado desde Madrid a Barbastro para conocer la colección que se custodia en el Museo de los Mártires Claretianos.

Dos días de estancia en la ciudad para verlas con mucha paciencia, propia de esta investigadora que fundó Aulas de Arte en Madrid, profesora en la Universidad de San Diego y en Fundación Ortega Marañón, avalada por su trayectoria universitaria, autora de trabajos específicos sobre la fotografía. “He venido a ver esta impresionante colección y la muestra expuesta”, indicó.

Hace ocho años trajo las fotos un profesor español, residente en el sur de Francia, cedidas por los autores que recorrieron casi toda España para dejar testimonio gráfico de la Guerra Civil desde el bando nacional. La colección es casi desconocida en España porque nunca se expuso y apenas hubo constancia en el Archivo Nacional, hasta que se depositaron en la Casa Museo por mediación del claretiano Javier Bielsa, que fue párroco de Naval, donde conoció al profesor que las conservó.

Hasta agosto de 2018 no se desveló la historia y fue el autor de “Toledo olvidado” quien investigó las imágenes captadas entre septiembre-octubre de 1938 y llegó a la conclusión que tras el pseudónimo Claudek estaba la condesa británica Claude-Marguerite de Kinnooul (1904-1985). Los autores pasaron por Huesca, Barbastro y Fraga, según consta en algunas fotografías. Marta López supo de la colección por “Toledo olvidado” y porque se publicó el primer reportaje en Diario del Alto Aragón.

“A raíz de mis investigaciones sobre mujeres reporteras en la Guerra Civil he venido hasta Barbastro, donde los claretianos me han dado todas facilidades. Me parecen impresionantes, por cantidad y el circuito geográfico que llevan consigo. Aparte, la personalidad de la propia condesa. Es una colección inédita y tiene algo importante, todas las fotos se captaron de inmediato a los hechos, algo que no es habitual”.

Marta López: "Me parecen impresionantes, por cantidad y el circuito geográfico que llevan consigo. Es una colección inédita"

Aparte, “destaca la calidad porque debía tener muy buena cámara y el nivel profesional es alto. Creo que es un hallazgo sobre el que escribiré y si es posible incluiré el tema en Jornadas de Fotografía, en Zaragoza o en otra provincia. Algunas son muy duras, me parece impresionante como se pudieron hacer, a veces caminando sobre escombros, entre cadáveres y destrozos. Son fotos espeluznantes”.

La condesa Claude-Marguerite de Kinnooul fue una mujer enigmática. Fundó misiones en África, su vida fue una odisea continua, pasó parte del exilio en Francia, y falleció en New York, en 1985, donde llegó en 1940 tras escaparse de la Gestapo Nazi por su participación en la resistencia belga.