Cultura

LA ENTREVISTA

“Tengo hecho un árbol genealógico de cada casa de Azanuy desde finales del siglo XIX”

Juan Antonio Lleida prepara un libro sobre los vecinos del pueblo y este miércoles compartió su trabajo de investigación en la XLII Semana Cultural

Juan Antonio Lleida.
Juan Antonio Lleida.
S.E.

El vecino de Azanuy Juan Antonio Lleida lleva cuatro años preparando el libro Las casas de Azanuy. “El interés por investigar y buscar información sobre las casas salió de una conversación con Juan José Monter un día que estábamos recordando quién vivía o había vivido en una u otra, y cuántos vecinos habían pasado por ellas, y pensé hacer una recopilación”.

A partir de ahí, Juan Antonio empezó a hablar con los vecinos e intentó localizar a los familiares de otros que están asentados en otras localidades, incluso algunos ya sin raíces en esta población literana. “La primera vecina con la que hable fue Angelita, de casa Alinsero, que me contó las personas que habían vivido desde antaño en su casa, y a esta conversación se fueron sumando otras y otras”. Al pasar a limpio la información se dio cuenta que tenía mucha documentación y que no podía centrarse solo en las casas. “Tenía los nombres de las personas y también sus apellidos, los primeros y los segundos. Al final he recogido información de 260 casas, de los abuelos y abuelas desde finales de 1800, los hijos que tuvieron, con quiénes se casaron éstos y sus descendientes y hasta la actualidad”.

Lleida dice que con la documentación que obra en su poder “tengo hecho como un árbol genealógico de cada casa de Azanuy desde final del siglo XIX porque la mayoría de esos abuelos y abuelas que voy investigando nacieron entre 1870 y 1890”.

Pero no todo ha sido recoger datos de nombres y apellidos sino también de anécdotas y cosas significativas. “Por ejemplo, en la ermita de San Antonio, una pequeña capilla que hay enfrente de casa Vallonga, se celebró en 1898 una boda de una hija de esa misma casa que casó con uno de Monzón. También he encontrado muchos niños y niñas que fallecían en el momento de nacer o a los pocos días, me he encontrado con muchas cosas, pero lo más importante, me lo he pasado muy bien”.

Además, con la relación de apellidos ha sacado los que más se repiten como “Rufas, Faure y Vidal”.

La publicación que ya tiene prácticamente terminada, se editará en castellano y en la fabla propia de Azanuy, todavía en uso. “Además, la persona que lo va a editar me ha dicho de ilustrar la información con una fotografía de la casa y ahora estoy en esta tarea”.

Este miércoles compartió todo este trabajo de investigación con sus convecinos en la XLII Semana Cultura, con el que se conocerá la historia de este lugar desde otro punto de vista, y espera poder presentar el libro como tal en la próxima edición “que si nos deja la pandemia se celebrará, como siempre, en el mes de enero porque hacerla como este año en verano, es una excepción”.

Juan Antonio Lleida es natural de Azanuy. A los 16 años se fue a Barcelona, donde ha desarrollado su vida personal y profesional, y ya jubilado, pasa mucho tiempo en el pueblo.