Cultura

CÓMIC

Huescómic 2021 abre sus puertas este viernes en la capital oscense

Una exposición de viñetas en homenaje a Divina Campo inaugura este encuentro

La serrablesa Alicia Soravilla  ha ideado el cartel de esta novena edición
La serrablesa Alicia Soravilla ha ideado el cartel de esta novena edición
S.E.

La tarde de este viernes arranca la cita anual con las viñetas en Huescómic, organizada por el Ayuntamiento oscense, con la inauguración de una exposición y la presentación del fanzine Divina Campo: viñetas de una fotógrafa, a las 18.30 horas, en la Biblioteca Municipal Ramón J. Sender.

El dibujante Chema Cebolla ha realizado para la ocasión un cómic de veinte páginas que repasa los años en los que la fotógrafa Divina Campo, una pionera que realizó su labor fotográfica en la capital oscense, fundamentalmente entre los años 1940 y 1950.

Cebolla toma como referencia para sus viñetas algunas de las instantáneas más icónicas de entre las captadas por Campo en la segunda mitad de los años 50. Este tebeo, que tendrá distribución gratuita durante el evento, estará complementado por una exposición de láminas en la biblioteca Ramón J. Sender, a cuya inauguración asiste este viernes la homenajeada.

Pero esta muestra de arte no es el único guiño que la novena edición de Huescómic hace a la figura y obra de Divina Campo puesto que también su cartel anunciador se ha inspirado en ella.

La joven dibujante Alicia Soravilla (Sabiñánigo, 2000) explica que se inspiró en una fotografía de Campo para realizar el diseño del cartel de esta edición: “He querido llamar la atención del espectador con el personaje principal de la imagen que está leyendo un cómic, con colores llamativos, para que en segundo plano haya información de esta cita cultural que pueda ser leída y dejando en tercer plano tres monumentos oscenses reconocibles; la Catedral, las Pajaritas y el Centro Cultural Manuel Benito Moliner”.

De este modo, el cartel, el cómic y la exposición dedicados a la destacada fotógrafa siguen la estela de los realizados en años anteriores sobre importantes figuras altoaragonesas, como Ramón Acín, Rayers Sam o José Cabrero Arnal.

Divina Campo, fotógrafa, cómic de Chema Cebolla
Divina Campo, fotógrafa, cómic de Chema Cebolla
Luis Hdez. Casado | S.E.

Este, sábado, se completará esta novena jornada de cómic en el Centro Cultural Manuel Benito Moliner de la capital altoaragonesa, con firmas de autores y ponencias, en un formato adaptado a las medidas sanitarias, que recupera buena parte de su pulso habitual, tras resistir el año pasado como uno de los pocos eventos de cómic celebrados en España.

El programa, con apertura de puertas a las 11 horas y hasta las 21, con descanso de 14 a 17, tendrá como otro de sus platos fuertes la presencia de tres destacados autores españoles.

En primer lugar, la barbastrense Sara Soler, última ganadora del premio a mejor fanzine en el Salón del Cómic de Barcelona y autora de una de las novelas gráficas de la temporada, Us en la que cuenta la historia de la transición de género de Diana, será a las 12 horas.

A partir de las 13 horas, será el turno de Luis Montes, uno de los nuevos exponentes del manga ‘made in Spain’ con su obra Gryphoon, y, por la tarde, Albert Monteys, quien tras pasar por las revistas El Jueves y Orgullo y Satisfacción ha consolidado su carrera con la entrada en el mercado estadounidense, con obras como Matadero Cinco, explicará su experiencia y su visión de la situación del cómic en España.

Por otro lado, cerrará esta jornada el doctor en Comunicación, especializado en Game Studies, Víctor Navarro, quien pondrá sobre la mesa la estrecha relación entre tebeos y juegos, tras una exhaustiva investigación publicada en Comic Ludens, cruces entre cómic y juego.

La cita en el Manuel Benito Moliner incluirá la exposición colectiva: Ramón J. Sender: portadas de cómic, que cuenta con la colaboración del Ayuntamiento de Chalamera y del Centro de Estudios Senderianos.

Coincidiendo con el 120 aniversario del nacimiento de Ramón J. Sender, una treintena de dibujantes aragoneses reimaginan las portadas de otros tantos libros del escritor de Chalamera como El lugar de un hombre, Imán, Crónica del alba o Mister Witt en el cantón.

Y es que, advierten desde la organización de Huescómic, la iconografía senderiana adquiere nuevos tonos populares gracias a la estética del cómic, un medio por el que la obra del autor apenas ha transitado, con la salvedad de El fugitivo y la adaptación de Réquiem por un campesino español a cargo de Carlos Giménez, y que ofrece un sinfín de posibilidades para su revitalización.