La menuda Nación del Funk

El Pequepop, festival navideño para toda la familia que tiene lugar cada año en Huesca y Zaragoza, celebraba este domingo su undécima edición en el Centro Cultural Manuel Benito Moliner. Como siempre, los mayores pagan su entrada y los menores acceden entregando un juguete que posteriormente Cruz Roja se encarga de repartir entre las familias más desfavorecidas.

Este año, los protagonistas del Pequepop eran los renacidos The Bronson. Tras unos años en stand by, la banda zaragozana ha regresado reconvertida en cuarteto. Una formación mucho más reducida que la que visitó Huesca hace ya seis años con motivo de la edición “Black” del festival Periferias.

Rafa Gobantes

En cualquier caso, su talento para montar una fiesta en cada una de sus actuaciones permanece inalterable. Y si, como es el caso, la actuación se produce ante un público familiar formado por padres e hijos con ganas de pasarlo bien, entonces el asunto deriva en un gran fiestón de funk y música bailable, capaz de levantar a todo el mundo de sus asientos y convertir a todos los asistentes en fieles adeptos a la Nación del Funk. Una “menuda” Nación del Funk, por aquello de la corta edad de muchos de los participantes.

Aunque lo cierto es que la pasión por el funk y el soul que siempre ha mostrado esta banda zaragozana, en su nueva versión reducida de cuarteto se ha visto aminorada para dar entrada a otros sonidos y ritmos como el eurobeat, la disco music, el house y el big beat. Un cóctel musical que, en todo caso, es la mejor medicina para levantar el ánimo y encender las ganas de bailar del personal, tan necesarias en una época como la que estamos viviendo.

Un año más, la “rusa” Ferropotrina fue la encargada de animar a los más pequeños en el Pequepop. Y ya desde el primer momento, con The Bronson disfrazados de pollos y gallinas, el público adivinaba que la velada iba a ser divertida y plenamente disfrutable.

Alternando las versiones con los temas propios, lograron conectar con grandes y chicos rápidamente. Como cuando enlazaron el Gonna make you sweat (Everybody dance now) de C+C Music Factory con el One more time de Daft Punk y el añejo y entrañable All night long (all night) de Lionel Richie, mientras en la pantalla trasera se emitían vídeos alusivos a las canciones.

Tras un tema propio Twilight Zone, cargado de tórrido funk, sonaron versiones como Danger! High Voltage de Electric Six o el archiconocido Ghostbusters de Ray Parker Jr, que fue cálidamente celebrado, mientras los componentes del grupo invitaban a todos los asistentes a colocarse los bigotes postizos para emular a Charles Bronson, célebre actor de acción al que este grupo debe su nombre.

Después, introdujeron unas notas del tema Relax de Frankie Goes To Hollywood en su versión de Go de los Chemical Brothers.

Y tras interpretar otros dos temas propios de su álbum de 2017 Kinjite, concretamente los vigorosos Meet me (at the dance floor) y Funky Robot, ofrecieron un sorprendente y potente mash-up con los temas Hey Boy Hey Girl de los Chemical Brothers y What is love? de Haddaway, con el que los padres se vinieron también arriba al recordar sus fiestas de otros tiempos.

Se despidieron con otro hit de la era eurobeat, Freed from desire de Gala, que combinaron con un bizarro paloteado.

Pero, ante el entusiasmo de grandes y chicos, los miembros de The Bronson regresaron al escenario para despedirse definitivamente con su versión de uno de los grandes himnos de la edad dorada de la música disco, el Maniac de Michael Sembello que se incluyó en la banda sonora de la película Flashdance.

Al final, quedaba la sensación de haber asistido a una de las ediciones más divertidas del Pequepop. Un gran fiestón.