Paula Canales: "El libro trata de explicar qué son estas piezas y cómo llegaron a Huesca"

La altoaragonesa Paula Canales, doctoranda especialista en arte egipcio, publica La colección egipcia del Museo de Huesca, editado por el Gobierno de Aragón, un libro que complementa la exposición Joaquín Lizana, pasión por Egipto, que se puede visitar en el Museo de Huesca hasta el próximo 3 de julio, y pone en valor la excepcional colección egipcia de este centro oscense, que constituye un conjunto único en el panorama museístico aragonés y de referencia nacional.

La publicación recoge la totalidad de los fondos donados sucesivamente por el egiptólogo Joaquín Lizana desde 1975 hasta su fallecimiento en 2020. Asimismo, incluye también las piezas egipcias anteriores donadas por Gabriel Llabrés en los primeros años del siglo XX, según explica Paula Canales a este periódico.

La experta en egiptología comenta que “trata de poner las piezas en contexto, a pesar de su dificultad, porque son piezas descontextualizadas que han llegado hasta nosotros a través del comercio legal de antigüedades que pudieron salir de Egipto en los siglos XVIII ó XIX”.

Paula confiesa que desde siempre ha sentido interés por la antigüedad egipcia, es lo que le llevó a conocer y entablar amistad con Lizana, quien le ofreció su colección para estudiar “cuando terminé mis estudios”, en concreto, añade: “yo estudio, para mi tesis doctoral, los amuletos, se centra en demostrar una idea que ya le rondaba a Joaquín, él me propuso estudiar los amuletos porque es un tema con mucha controversia que no se ha enfocado desde todos los puntos de vista”. Así defiende que “hay amuletos que se utilizaban tanto en los enterramientos como en el día a día porque los egipcios los utilizaban de la misma manera que nosotros”, argumenta que “no todos están relacionados con la religión sino que eran puros talismanes, como yo puedo tener un boli que me trae suerte en los exámenes”. Y subraya que “a través de su estudio se puede comprender cómo los egipcios entendían el mundo, cuáles eran sus miedos y cómo los afrontaban”.

Sobre La colección egipcia del Museo de Huesca advierte que, tras la muerte de Joaquín Lizana, en octubre de 2020, el Museo de Huesca quiso hacer una exposición en su honor ya que la mayor parte de su colección son sus donaciones, de ahí el libro que narra cómo han ido siendo esas donaciones y explica las piezas, se ponen en un contexto histórico y cronológico, cuando es posible, y trato de facilitar la comprensión de estas piezas que, a priori, no se relacionan con la cultura egipcia, algunas sí porque todos conocemos la relevancia de los escarabajos para los egipcios, por ejemplo, pero quizá no es tan sabido que tienen puntas de flechas de sílex o que escribían en escritura copta en fragmentos de cerámica”.

Por ese motivo, relata Paula que “no es un catálogo como tal, he afrontado el libro con la idea de explicar qué son estas piezas, para qué se usaban y de qué forma llegaron a Huesca”.