Silberio Sáez: "La seguridad emocional y el apego previenen la violencia de género futura"

La Educación Afectivo-Sexual desde la Familia, de 0 a 6 años, es el título de la jornada en que se centra el programa formativo sobre la educación afectivo-sexual dirigido a familias, que organiza el Ayuntamiento de Huesca e imparte el sexólogo Silberio Sáez, en el Centro Cultural Manuel Benito Moliner, a partir de las 17 horas.

A través de esta escuela se pretende dar herramientas a las familias para abordar la sexualidad desde la infancia para asentar unas buenas bases de seguridad emocional.

El sexólogo advierte que apenas se llega a las edades más tempranas, puesto que es la secundaria, es decir en la adolescencia, “cuando se llevan a cabo las intervenciones de peso, y en ese caso hay un gran sesgo porque ya llegamos a nuestros hijos más desde el miedo a que les suceda algo que desde la calma de intentar trabajarlo como un valor”. Por este motivo Sáez imparte esta formación para edades tempranas porque “es una etapa muy buena, un momento de evolución sosegada y de buena comunicación con la familia”.

Con esta escuela se pretende demostrar que, al final, “aunque muchas veces las familias ponen el acento en cuánto y cómo se habla, lo importante es que se den cuenta de que la propia pareja, como un modelo vivencial, es lo que va a marcar la naturalidad sobre este tema y va a marcar la evolución sexual de nuestros hijos”, indica.

La de hoy es una charla dirigida a los más pequeños para consolidar su seguridad emocional, “muy importante para, más adelante, facilitar una buena evolución de su sexualidad”, explica Sáez porque suelen ser los olvidados en estos temas, porque “muchas veces se centran en lo genital y lo reproductivo entonces se obvian estas edades pero, hoy se hablará de seguridad emocional, apego y vínculos afectivos que sirven para prevenir la violencia de género en el futuro o la percepción de los vínculos tóxicos”.

Por otro lado, el próximo lunes 28, será la última jornada, la Educación Afectivo-Sexual desde la Familia, de 6 a 12 años porque “cuando llegamos a la preadolescencia hay influencias que debemos atender: presión de grupo, el uso del móvil, posibilidad de acceso a la pornografía, pero se abordan con más calma si hemos trabajado”, advierte Sáez.