Cultura

LA ENTREVISTA

Kike Fernández: “Amaban la montaña pero volvían enriquecidos por lo que habían vivido”

El escritor altoaragonés publica la obra titulada ‘Viaje al mar. Diario de un nabatero’ (Pregunta Ediciones), “un relato verosímil”

Kike Fernández.
Kike Fernández.
S. E.

El altoaragonés Kike Fernández tiene desde finales de marzo en las librerías la novela Viaje al mar. Diario de un nabatero, una obra “a medio camino entre la novela y el ensayo” que “nos muestra cómo era el apasionante oficio de los navateros, transportistas fluviales de madera a comienzos del siglo XX, y busca mantener su memoria para evitar que vuelvan a caer en el olvido”, dice en su web la editora de este libro, Pregunta Ediciones.

Un año de trabajo le ha llevado a Kike Fernández, que es navatero desde 1992, escribir este libro, “después de leer todo lo que había de navatas, estaba todo escrito ya y todo documentado por Severino Pallaruelo y otra mucha gente, aunque como escritor pensaba que faltaba el relato”. Y esto es lo que ha hecho, relatar la vida de estos transportistas fluviales a comienzos del siglo XX, en concreto en el año 1918, viajando desde tierras del Sobrarbe hasta la desembocadura del Ebro.

A la pregunta de ¿por qué ha decidido centrar la historia en el año 1918, precisamente, Kike Fernández responde: “Porque es una época en la que empezaba a cambiar todo; empezaban las carreteras, empezaban a hacer las obras diferentes, que si los camiones, los trenes. La vida de los navateros que había sido igual durante siglos y siglos, fue cuando empezó a cambiar, más o menos. Todo su entorno cambiaba muy rápido y la gente del Pirineo no estaban acostumbrados, después de haber vivido igual durante muchos siglos”.

“Es un relato verosímil. Los personajes son inventados pero todo tiene verosimilitud, todo encaja en la época del relato”, explica Fernández, quien reconoce que no le ha resultado complicado hacer esta obra, ya que como navatero que es conoce la historia y la práctica de esta actividad fluvial, “y simplemente me ha tocado poder imaginarme el entorno de aquellos tiempos, cómo estaba el Pirineo entonces, cómo era el viaje, la ida la vuelta del viaje”.

Para esta autor, los navateros “eran como exploradores, gente que les gustaba ir a otros sitios, a otros mundos, otros amores, otros aromas, otros olores... Amaban la montaña pero volvían enriquecidos por lo que habían vivido”.

Kike Fernández tiene en su trayectoria literaria varios cuentos publicados en revistas, y es autor de los relatos Maceracandos (accésit del premio literario El Fogaril 2010 en temática Sobrarbe, incluido en La prueba final y otras historias, Pregunta, 2017) y Amistad vertical (premiado e incluido en Montañas confinadas, Desnivel, 2020) y del libro Camino de la selva y otros relatos de Sobrarbe (autoedición, 2019). Sobre esta última obra citada, explica que “lo hice mediante un crowdfunding (micromecenazgo) y me salió muy bien”.

Y dada su querencia hacia el tema de las navatas de Sobrarbe, “Viaje al mar. Diario de un nabatero quería hacerlo para que tuviera una distribución un poco más extensa y la verdad es que en Pregunta Ediciones se han portado muy bien y estoy muy contento con ellos”.