Cultura

PRESENTACIÓN

‘La pelea del siglo’, la ficción de una historia real a través de viñetas

David Terrer y Chesús Calvo presentan en Másdelibros su primer trabajo juntos coincidiendo con el Día del Cómic

David Terrer y Chesús Calvo presentaron su cómic en Másdelibros.
David Terrer y Chesús Calvo presentaron su cómic en Másdelibros.
D.A.

El cómic La pelea del siglo (GP Ediciones) ficciona de las manos del guionista David Terrer y el dibujante Chesús Calvo, un suceso real. “Navegando por internet llegué al blog ‘Historias de la historia’ y encontré ésta -explica Terrer-. Enseguida me atrapó por lo curiosa que era”. Su protagonista, Sadakazu Uyenishi, Rakú, un maestro de jiu jitsu muy joven había formado a militares, policías e incluso a las activistas del movimiento sufragista en Londres. En octubre de 1908, Rakú llegó a Zaragoza dentro de una gira para popularizar este arte marcial. Nadie había sido capaz de vencer en un combate a este hombre de 1,65 metros y 58 kilos, pero en tierras aragonesas encontró un rival inesperado. “El propio Rakú, cuando le pregunta un periodista del diario gijonés El Noroeste en 1909, responde que recuerda muy bien su paso por Zaragoza el año anterior, donde se enfrentó a un ‘oso con camisa y garras de tigre’ que casi le da una paliza”, relata.

Con estos mimbres escribió una historieta de ficción y le pasó el guión a Chesús Calvo, que lo leyó y la pareció “una historia muy interesante y perfecta para contar en formato cómic”, y que presentaron este sábado en la librería Másdelibros de Huesca coincidiendo con la conmemoración del Día del Cómic.

Aunque David Terrer no había escrito nunca una obra de esa época, reconoció que “fue relativamente sencillo construirla con un protagonista tan interesante como Rakú y ese choque cultural en la Zaragoza de principios de siglo”. También fue nueva para él la colaboración con Chesús Calvo, “que ha resultado tan interesante, que espero que sigamos trabajando juntos, aunque todavía no hay nada decidido”. El ilustrador opina de forma similar. “Antes de afrontar una página hablaba con David si tenía alguna duda, y una vez terminada se la hacía llegar por si quería comentar algo y hacer alguna modificación con la que pudiera ganar el resultado final”, que definió como “muy satisfactorio”.

David se enfrentó al papel en blanco para guionizar “ese choque cultural entre un japonés como Rakú (en realidad son dos porque va acompañado de su ayudante Deko) y la Zaragoza de principios de siglo, que con sus personajes de la noche, da mucho juego para la comedia, que está muy presente en la obra”, indicó Terrer.

En el caso de Calvo, “ser capaz de recrear la época en la que transcurre el guion y la Zaragoza de entonces, de manera que sea creíble para quien se acerque a ella” no ha sido tarea fácil, sobre todo porque le gusta “que cualquier pequeño detalle en cualquier viñeta pueda contribuir a mejorar el conjunto”.

Guionista y dibujante han sabido maridar sus artes, y rescatar un hecho real al que han aportado “unas gotas de humor” que hacen que “cualquier historia entre mejor”, convencidos, como dijo David Terrer, de que “si puedes provocar una sonrisa en el lector, genial”.

De hecho, ambos se retrotraen en el tiempo y viajan a la Zaragoza de hace un siglo y lo cuentan desde el punto de vista de un joven maestro japonés de jiu jitsu y “en clave de humor, con encuentros nocturnos inesperados y una emocionante pelea final con un fortachón aragonés”, recordó Terrer.

Además, al rescatar el paso por la capital aragonesa de Rakú, traen hasta el siglo XXI al joven maestro de artes marciales. “Muchas veces, los guionistas y escritores en general nos empeñamos en buscar historias “de fuera” y sólo tenemos que mirar “hacia dentro” para encontrar buenas con raíces en nuestra tierra, Aragón. Y para ello solamente hay que echar un vistazo a las hemerotecas o también, por qué no, preguntar a nuestros mayores”, afirmó Terrer. “Es importante conocer nuestra historia reciente, incluidas esas “pequeñas” que la componen”, reiteró Calvo.

David y Chesús se mostraron encantados de presentar La pelea del siglo en Huesca y hacerlo el Día del Cómic, porque “cualquier oportunidad de celebrar este día y poder compartirlo con los lectores hace que sea un día especial”, dijo Calvo, mientras que Terrer insistió en que “obviamente es una historia muy zaragozana, pero al mismo tiempo universal y para todo tipo de lectores. Lógicamente nuestra editorial es aragonesa y nuestros lectores más fieles son aragoneses. Por eso creo, que a los oscenses también les gustará La pelea del siglo”.