Fernando Escartín ve con incertidumbre la QH 2020

HUESCA.- Pasado y presente del ciclismo altoaragonés. El domingo el ciclista serrablés de Movistar Jorge Arcas y el ex ciclista biesquense Fernando Escartín compartieron una hora de charla a través de un directo de Instagram patrocinado por la firma de ropa de ciclismo italiana Ale Cycling, que viste al equipo Movistar y de la que Escartín es el representante en España.

Mientras los dos, cada uno desde su casa, se subieron a la bici para dar pedales en el rodillo, hablaron de ciclismo y Escartín, como parte de la organización de la Vuelta a España, y además presidente de la Peña Ciclista Edelweiss de Sabiñánigo, organizadora de la Quebrantahuesos, dio un poco más de luz sobre el calendario y qué va a pasar en los próximos meses.

Escartín, preguntado por la Vuelta, y cómo ve el que se pueda disputar en noviembre, señaló que "sabemos cuándo va a ser el Tour, y a partir de eso vendrá lo demás. Esta semana se reúne la UCI y sabremos más cosas sobre el Giro y la Vuelta. Habrá que encajarlo". Incluso aventuró que ambas carreras pudieran coincidir en algún día debido a la escasez de fechas disponible. Eso sí, el biesquense tenía claro que habrá tiempo para que los ciclistas puedan volver a entrenar un plazo de tiempo razonable para recuperar el nivel competitivo.

Y sobre la Quebrantahuesos, dejó claro que el aplazamiento a septiembre da más tiempo, pero que a día de hoy no está claro que finalmente se pueda celebrar. "Hay que esperar a las autoridades y a ver cómo está la situación entonces, porque una cosa es que no estemos confinados y otra que se puedan celebrar eventos multitudinarios con normalidad. Vamos a ver, y si definitivamente no se puede hacer, la dejaremos para el año que viene".

Por otra parte, Escartín recordó sus tiempos de ciclista, con otros materiales y entrenando de otra manera, señaló que su mayor alegría fue la victoria en Piau Engaly en una etapa del Tour de 1999, y el peor momento, la caída en la Vuelta a España en la Cobertoria, donde impactó contra un quitamiedos, se rompió varias costillas y pasó unos momentos dramáticos en los que se temió "lo peor". También, cuando le preguntaron por un ciclista actual con el que se identifique, dejó el momento gracioso de la tarde al señalar que todos lo dicen que es como el holandés Bauke Mollema, porque ambos ponen la misma cara de sufrimiento e incluso inclinan la cabeza a un lado de manera similar.

También dijo que para él el puerto más duro es el Mortirolo, en Italia, y el mejor ciclista con el que ha competido, Indurain.

Por su parte, Jorge Arcas contó su trayectoria para llegar a profesional, desde la PC Edelweiss con Ramón Tomás, y defendió la zona en la que vive como ideal para entrenar con puertos como Cotefablo o sobre todo Betés, que ha llegado a subir tres o cuatro veces en un día. También habló de su experiencia en la Vuelta, con un primer año negro por su caída en la primera etapa y un segundo en el que pudo disfrutar mucho más.