El frustrado sueño de ocho candidatos a ir al Mundial Sub-20 de Kenia

HUESCA.- Hasta ocho atletas altoaragoneses -cinco de Hinaco, dos de Intec-Zoiti y una del CA Fraga- han visto truncado el sueño de acudir a la gran cita del verano, el Mundial Sub 20 de Kenia, previsto para el próximo mes de julio y cancelado a causa de la pandemia del coronavirus. Pol Oriach, Laura Pintiel, Mario Revenga, Pablo Delgado y Marco Sampedro forman parte de la denominada "generación de oro" de la armada montisonense. Teresa Santolaria lidera la zoitista, junto con el saltador zaragozano Iván Sampedro, vinculado también a los verdes oscenses. Y la ballobarina Elena Daniel completa la terna de candidatos.

El mundo atlético, por el covid, se detuvo justo cuando se iba a celebrar el Campeonato de España Sub-20 de pista cubierta en Sabadell. Hinaco perseguía el hito histórico, bastante razonable por otra parte, de firmar un pleno en la prueba de 60 vallas con Revenga, Delgado y Sampedro. Pintiel iba a por un podio del que no ha salido desde cadete y una de sus rivales directas era precisamente Elena Daniel. Por su parte, Pol Oriach logró sobre la bocina coronarse campeón de España de cross como colofón a un gran invierno.

La zoitista Teresa Santolaria llegaba de lograr un excepcional cuarto puesto en el Campeonato de España absoluto e iba a por el oro en su categoría en el concurso de longitud. Su compañero de club, el zaragozano Iván Martín, era también firme aspirante en el triple salto.

"Va a haber más campeonatos y más oportunidades", afirma Mario Revenga, que se aplica bien al mensaje que les transmite su entrenador, Richy Verdugo, para trabajar en el presente mirando al futuro y pasar página de lo que ya no tiene remedio.

En esa tesitura, el vallista montisonense asegura que ha hecho una cuarentena "llevadera", haciendo rutina diaria en casa para no perder el tono y volviendo a la pista con una sonrisa desde hace un par de semanas. "Ahora no tenemos objetivos de competición. Teníamos, tanto en pista cubierta como al aire libre, la posibilidad de ser tres medallistas en el Campeonato de España en la misma prueba y la opción de pelear por ir al Mundial. Estábamos en condiciones de conseguirlo todo porque no estábamos lejos. Y ahora la pena es que el año que viene ya no estaremos juntos en el grupo de entreno".

Al respecto, recuerda que Pablo Delgado acaba como Sub-20 y que él mismo va a ir a estudiar fuera (tiene pensado ir a Madrid para hacer Ciencias de la Actividad Física y del Deporte).

En Kenia hubiera disfrutado de su sexta internacionalidad tras las que ha vivido desde 2017en el FOJE de Hungría (cadete), como juvenil en el Encuentro Ibérico, en el Campeonato de Europa y el año pasado en Bakú y el pasado mes de febrero en Minsk.

"Esperamos que el trabajo que estamos haciendo ahora nos sirva para sumar y estar fuertes el año que viene. También estaría bien tener alguna competición antes de cerrar esta temporada, aunque parece complicado", comenta, Pablo Delgado tenía ese doble reto del triplete con sus compañeros en los nacionales y poder cerrar su etapa júnior en el Mundial. "Ahora en las pistas todo es mejor. Richy nos ha ido buscando las mejores soluciones en casa y ahora el objetivo es adaptarnos a lo que hay y sobre todo a evitar lesiones. Estaos haciendo base y disfrutando".

El frenazo de la temporada supuso para él "un palo grande" por la ilusión que tenía el grupo de "un triplete histórico para el club, que era muy chulo".

Y luego el Mundial. "Era un objetivo factible y algo muy bonito por lo que luchar. El año pasado no logré coger el ritmo de competición pero esta temporada iba muy bien".

Y ante la nueva normalidad, "entrenamos más tranquilos, por mantener la forma y porque nos gusta el atletismo. Richy nos dice que la base de este año nos servirá para el futuro. A ver si al menos nos podemos quitar la espinita con alguna competición en Monzón".

Marco Sampedro era el tercer candidato de la aspiración del triplete. "Era un objetivo muy bonito, histórico para el club. Cuando se suspendió nuestro Campeonato de España fue una decepción, pero no hay que bajar la cabeza y seguir adelante", destaca el joven y emergente vallista barbastrense, que a pesar de considerarse "un novato", encontró su catapulta el verano pasado con la plata lograda al aire libre.

Y también soñaba con el Mundial. "No suelo ponerme metas muy exigentes o crearme falsas expectativas, porque si no lo consigues la frustración es mayor. Lo importante es sentirse bien con uno mismo y mantener la forma. La vuelta está siendo progresiva y no perdemos la ilusión y la motivación. Formamos un grupo en el que no decae el ánimo", subraya.

Laura Pintiel completa el grupo de Verdugo entre los aspirantes y no ha perdido la sonrisa. "Todos hemos vuelto a la pista con muchas ganas, ya la echábamos de menos".

Admite que "no es lo mismo entrenar sabiendo que hay una competición tal día, pero estamos con ilusión y disfrutamos porque hacemos lo que nos gusta".

Pintiel reconoce que "ha sido un chasco" no haber podido pelear por ir al Mundial, que hubiese sido su sexta internacionalidad, "pero es algo que no podemos controlar y no depende de nosotros".

No obstante, "mantenemos la planificación, lo que hacemos nos servirá para el futuro y volveremos a primeros de septiembre".

Su futuro también se alejará (al menos físicamente) de Monzón ya que tiene previsto ir a cursar sus estudios universitarios a Barcelona.

El quinto atleta de Hinaco es Pol Oriach. El discípulo de Phondy terminaba de cerrar un excelente invierno tras la medalla de plata en 2.000 obstáculos en Minsk y el oro en el Nacional de cross, que fue la última competición antes del estado de alarma. "Tuve la suerte de competir y demostrar lo que llevaba dentro", indica.

El confinamiento para él ha tenido una particularidad ya que en su casa en Albelda tiene un campo y eso le ha permitido "seguir corriendo y que me diera el aire".

"Tenía muchas ganas de ir al Mundial de Kenia, es un país al que a lo largo de mi carrera quiero ir y me veía con muchas posibilidades de estar allí", lamenta.

Para Pol, seis veces internacional, era una temporada cargada de novedades , al pasar a los 3.000 obstáculos. Mil metros más y otras dos rías más que atravesar "y que se hacen muy duras".

Admite "una sensación rara porque teníamos una temporada muy bien organizada, veníamos de un invierno buenísimo, y de repente todo se ha esfumado y da mucha rabia".

Sin embargo, "me quedan muchos años y por no competir uno no pasa nada. Hay que saber valorar lo más positivo, que es poder entrenar y tener salud".

TERESA SANTOLARIA

A la joven atleta zoitista solo le faltaba poner la guinda del invierno en Sabadell. Había sido plata en el encuentro internacional de Minsk y logrado un cuarto puesto de sabor dorado en el Nacional Absoluto. "La suspensión fue dura y triste porque iba con posibilidades y en muy buena forma", lamenta.

Y por si fuera poco, el Mundial de Kenia. "Tenía la mínima un poco lejos, pero la podía conseguir y hay que continuar trabajando. Pese a todo, sigo motivada y si mantenemos la forma será más fácil volver a competir. Ahora que ya hemos vuelto a la pista y estamos todo el grupo parece como antes".

Mientras tanto, Teresa prepara la selectividad (quiere hacer Medicina y la experiencia de la pandemia va a ser "una lección de vida") y entrena de forma alterna con Dani Durán y Gustavo Adolfo Bécker, sus dos preparadores.

En casa tiró de ingenio para no perder el tono. Ejercicios para fortalecer brazos y espalda con garrafas de cinco litros y para hacer sentadillas tiró de sendas garrafas de agua y el palo de la escoba.

Especialista en los saltos (longitud, que era su aspiración mundialista, y altura) y buena velocista, no quiere centrarse de forma específica en una disciplina. "De momento voy a seguir igual. Mientras pueda...", concluye.

ELENA DANIEL

La ballobarina del CA Fraga completa la terna de jóvenes candidatos al Mundial Sub-20. La velocista, también con experiencia internacional, ha mantenido la rutina diaria durante el confinamiento en contacto directo con su entrenador, Eloy Mur. "En casa han trabajado coo han podido, pero en general bien para no perder la forma", señala el preparador, que lamenta el aplazamiento del Mundial ya que "Elena estaba muy cerca de la mínima, la tenía a su alcance y es su último año júnior. Vamos a seguir entrenando y a esperar el calendario por si hay alguna competición. A pesar de todo, los atletas siguen motivados y a ello también ha contribuido la vuelta a la pista", comenta Mur.