Laura Ortiz: “Definido como gimnasia a caballo, es un arte y un deporte muy competitivo”

Laura Ortiz vive en Sabiñánigo. Monta a caballo desde los 4 años. Su pasión es el “Volteo”, una disciplina de la equitación. “Está definido como gimnasia sobre un caballo al galope en círculo, guiado a la cuerda por un conductor. Es un arte y un deporte altamente competitivo, es uno de los acontecimientos ecuestres competitivos reconocidos por la Federación Ecuestre Internacional”.

Cuando tenía 7 años, la hípica donde montaba a caballo cerró, “y la dueña empezó a enseñar a sus hijas esta disciplina, y convencí a mi madre para que me enseñaran a mí también. Empecé a entrenar en ese equipo que se llamaba Taller de Volteo de Ana de Ruiz, en Zuera, y participamos en el Campeonato de España de Jerez de la Frontera. Ganamos y nos convertimos en la selección española”.

Cuando los miembros de este equipo estaban en el instituto les hicieron deportistas de alto rendimiento. “Al llegar a cierto nivel, en España no había nadie que nos pudiera entrenar, y los veranos desde 1997 hasta el 2001 íbamos a Alemania. También a lo largo del curso pasábamos semanas enteras en Alemania y Suiza porque en estos países el ‘Volteo’ es muy conocido y para formarnos allí estaba mucho más avanzado”. En esa época el equipo de Laura participó en todos los campeonatos de España y compitieron en internacionales. “Estuvimos en Francia, Italia y Alemania, no ganamos, pero la experiencia nos enriqueció mucho”.

Laura Ortiz tiene 35 años y lleva toda la vida practicando el “Volteo”. Explica que en 2002 se disolvió su equipo y desde entonces y hasta 2015 entrenó por libre, sin competir. “Y decidí que si quería seguir entrenando tenía que formar un equipo. Para entrenar siempre me desplazaba a Madrid o Barcelona, y por aquí iba a algunas hípicas, pero sin material adecuado, ni caballos preparados”.

Con la ilusión de que el “Volteo” fuera creciendo, Laura formó su propio equipo. Desde 2015 y hasta febrero de este 2021 estuvo en la hípica Los Rosales, en Huesca, y desde hace unas semanas están en la de Salas. “Se ha unido al equipo Laura Calavia, una gran profesional ecuestre, que comparte conmigo esta pasión por el ‘Volteo’, y hemos empezado con el nuevo proyecto. Los dueños de esta hípica nos han apoyado desde el primer momento, nos han dejado un caballo que es maravilloso, se llama Tabú, y ya estamos dando clases”.

Ahora, con más ilusión que nunca, “sigo con este proyecto porque mi hija Claudia lleva practicando el ‘Volteo’ desde que tiene año y medio. Hizo su primera competición en Madrid en 2019, con solo 2 años en la categoría territorial mini paso. Es la volteadora federada más joven. Para mí es una ilusión que siga mis pasos”.

El pasado fin de semana compitieron en Madrid en el Nacional de Volteo. “Estoy muy contenta de que el equipo de ‘Volteo’ de Nuestra Señora de Salas, que dirijo y entreno, represente a Huesca y Aragón en estas competiciones, y espero vengan muchas más”.