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La Carrera de Navidad no falta a su cita

Los participantes podían hacer el recorrido por su cuenta ante ‘la nueva normalidad' este sábado

Los participantes han realizado el recorrido por su cuenta en pequeños grupos.
Los participantes han realizado el recorrido por su cuenta en pequeños grupos.
S.E.

La ‘nueva normalidad’ (palabro aceptado por la RAE) ha sido capaz de modificar, por segundo año consecutivo, el desarrollo de la tradicional Carrera de Navidad, que este sábado ha cumplido su cuadragésimo segunda edición con distinto sabor pero con el imperecedero espíritu de siempre. 

La Carrera de Navidad y el Club de Atletismo INTEC-ZOITI tomaron la decisión, ante la evolución de la situación sanitaria en las últimas semanas en nuestra ciudad, de transformar este año la convocatoria tradicional para que cada participante o pequeños grupos pudieran hacer su recurrido y evitar posibles contagios por la aglomeración de anteriores ediciones en las que se daban cita más de dos centenares de corredores.

El gusanillo siempre está latente en este día tan especial que comenzaron a trazar con letras imborrables los pioneros Martín, Armisén y Ariño cuando dieron hace 42 años aquella primera ‘vuelta larga’. A buen seguro, su recuerdo acompañó con su silencio sonoro a todos cuantos ayer se calzaron las zapatillas deportivas. Porque, sabedores de la necesidad de correr, entrenar o pasear que los habituales asistentes a esta carrera siempre han mostrado, se propuso la opción de realizar la prueba cada cual a su aire el mismo día de Navidad, siguiendo el tradicional recorrido.

El buen tiempo ha sorprendido con un día soleado y una agradable temperatura, que se ha plasmado en una notable presencia de andarines y caminantes por todos los alrededores del recorrido, en especial en los aledaños de la ermita de Loreto, pero en esta ocasión el número de participantes, al no existir inscripción ni el recuento manual de otras ocasiones, no podrá quedar reflejado en el registro de los records. No obstante, los que han completado el trazado han podido dejar constancia con sus fotografías en las redes sociales y han compartido de esta manera “el espíritu navideño, deportivo y de confraternización” que desde sus inicios impregna esta carrera.

Algunos pequeños grupos se han pasado sobre las once de la mañana por la salida del aparcamiento del campin de San Jorge para cumplir con el protocolo inicial, aunque el resto del acto festivo y de los rituales típicos de todos los años precedentes ha habido que dejarlos para mejor ocasión. “No olvidemos que la carrera de Navidad es un acto festivo, una celebración que está viva en el espíritu de cada corredor, por ello aunque diferente, cada uno de nosotros celebraremos esta 42 edición. Estimamos que el mejor regalo navideño es cuidarnos y por extensión cuidar a los de nuestro entorno. Esperamos, el próximo año, en la 43 edición, poder volver a compartir el tradicional recorrido con todas y todos vosotros”, apuntan desde la organización.