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DEPORTES DE HIELO

Pepe Arbués: “Jaca respira hielo”

Emblema del hockey jaqués, publica un libro sobre los 50 años de los deportes de hielo

Pepe Arbués con uno de los títulos logrados por el CH Jaca durante su etapa como presidente.
Pepe Arbués con uno de los títulos logrados por el CH Jaca durante su etapa como presidente.
S.E.

Francisco José Arbués, conocido popularmente como Pepe Arbués, es uno de los grandes nombres de la historia del Club Hielo Jaca, en cuyas filas fue jugador de hockey, entrenador y presidente en diversos periodos, además de seleccionador nacional, convirtiéndose en testigo de excepción de los 50 años de los deportes de hielo en la ciudad jaquesa, sobre los que guarda infinidad de recuerdos y una extensa documentación.

Todo ese legado dio pie a “Un sueño de juventud”, un libro compuesto por 516 páginas y un millar de fotos, que edita la Asociación Cultural Jacetana y que se presentará el día 3 de enero, a las 20 horas, en el Casino Unión Jaquesa. En la presentación se darán cita el presidente de la Real Federación Española de Deportes de Hielo, Frank González; el del club jaqués, Antonio Betrán; y el del casino, Pedro Juanín, así como el alcalde, Juan Manuel Ramón; el diputado nacional Mario Garcés y el ex director de Cope Aragón, Javier Ferrer, que moderará el acto.

Para Arbués, “Jaca respira hielo por los cuatro costados” y “está orgullosa de los acontecimientos deportivos que ha habido y de las instalaciones que hemos tenido”, en alusión a la pista de hielo de 1972 (hoy derribada) y al pabellón inaugurado en 2007, por los que “han pasado algunos de los mejores patinadores y jugadores de hockey”.

Arbués, en su etapa como jugador del equipo.
Arbués, en su etapa como jugador del equipo.
S.E.

“Las pistas de hielo han situado a Jaca en el mundo y han hecho que venga muchísima gente, con lo que eso ha representado para la vida social y comercial. El hielo ha sido un motor para la economía jaquesa”, continuó el autor, cuya obra pone en valor el trabajo de los pioneros, que, como dice el título, “tenían un sueño de juventud, que se ha cumplido”.

En este sentido, destaca que uno de los prólogos del libro pertenece al ex presidente del COI, el fallecido Juan Antonio Samaranch, “uno de los precursores de la pista de hielo”, junto al entonces alcalde, Armando Abadía. También prologan la obra el presidente de la Federación Internacional de Hockey Hielo, René Fasel; Frank González y Juan Manuel Ramón.

Anécdotas

Su libro ‘Un sueño de juventud. 50 años de hielo en Jaca’ aglutina un sinfín de anécdotas, como “cuando Armando consiguió que se hiciera un sorteo de la lotería nacional para ayudar al Festival Folklórico”. “Se trajeron los bombos que hay en televisión y las chicas que sacaban los números iban vestidas de chesas y ansotanas”, explicó. La pista de hielo también acogió el concurso de belleza de la Maja de España o la presentación del Opel Corsa Jaca, que se lanzó en 1989 como apoyo a la candidatura olímpica.

“TVE vino a Jaca la tira de veces”, recordó Arbués, que participó en el programa Objetivo 92, junto a la profesora de patinaje Allison Smith, “promocionando el hockey y el patinaje en horarios juveniles de máxima audiencia”. Con los mundiales de patinaje y las Universiadas de 1981 y 1995, “Jaca ya era un referente”. Y el hockey fue cogiendo fuerza, llegando a convertirse el Club Hielo Jaca en el equipo más laureado de Aragón.

De los inicios, Arbués dijo que “el equipo -siendo él jugador- fue a un torneo en San Sebastián y ganó al Madrid, algo tremendo para unos críos de pueblo”. Eso les animó a quedarse y jugar contra el Barça y la Real Sociedad, en un viaje inolvidable. “Con (Pedro) Juanín preguntamos dónde dormir gratis, nos dijeron que en la Misericordia y lo hablamos con las monjas”, rememora el jacetano, que vivió “una lucha interna” por causas familiares. “Se casaba mi hermana, no fui a la boda y volví ‘acojonado’, pero no me lo tuvieron en cuenta”, declaró, entendiendo lo sucedido como “un aviso de que el hockey iba a ser importante en mi vida”.

Uno de los baluartes del libro es su documentación. “He pasado por todos los estamentos y he guardado todo. Entonces, tengo un archivo impresionante”, dijo Arbués, que padece la enfermedad de Perthes. “Aquello me hizo crear una personalidad fuerte, que trasladé al deporte (al baloncesto y al balonmano) hasta que salió la pista de hielo”, señaló el jaqués, al que pronto le picó el gusanillo y empezó a guardar pastillas, posters o pins, además de numerosos datos.

“Junto a las anécdotas y las fotos, el libro tiene unas connotaciones estadísticas importantes”, manifestó el autor, recordando que “el Club Hielo Jaca, en sus inicios, perteneció al Ayuntamiento”, cuyo archivo “solo recogió lo que repercutía económicamente (contratación de jugadores, viajes, etc…)”. En su etapa como presidente, elaboró un archivo por temporadas, pero la mayor parte del material se degradó en la pista de hielo a causa de la humedad. Para preparar el libro, también contactó con las diferentes federaciones nacionales que han gestionado los deportes de hielo.

“Al final, he intentado que todo el mundo que ha pasado por allí se vea reflejado”, afirmó Arbués, lamentando “haber tenido que prescindir de varios apartados”, porque “sino el libro -cuya portada es del jugador de hockey y diseñador gráfico Adrián Betrán, de Castiello de Jaca- se iba a convertir en una enciclopedia”.

Extensos agradecimientos

Para concluir, el autor muestra su agradecimiento a los alcaldes, que “creyeron y confiaron en el club y en la pista como instalación relevante de promoción de la ciudad”; a las directivas de los clubes locales, que “invirtieron su tiempo para que los jacetanos pudieran desarrollar el deporte en las mejores condiciones”; y a los presidentes de las federaciones españolas, “que han trabajado para tener una federación propia y haber llegado a estas cotas”.

Además, expresa su gratitud hacia los trabajadores de mantenimiento de las pistas de hielo y los jugadores de las diferentes secciones, “por su dedicación, entrenando a horas intempestivas y haciendo viajes larguísimos de fines de semana”. Por último, cita a su familia. “Les quité mucho tiempo con el hielo y ellos, conocedores de lo que representa para mí, siempre me han apoyado”, concluyó Pepe Arbués.