Jorge Broto, “más maduro” bajo palos

El portero oscense Jorge Broto cumple su segunda temporada en el Ibiza, de División de Honor Plata, donde está compatibilizando el deporte con su profesión de enfermero, algo que le resulta enriquecedor en todos los planos, aunque también reconoce que es duro en algunos momentos.

Broto está contento de como está yendo la temporada. El equipo marcha cuarto de su Grupo y tiene el objetivo de meterse en el grupo por el título en la segunda fase para así asegurar la permanencia y, una vez allí, tratar de dar lo mejor sin fijarse topes.

Broto recuerda que son un bloque joven en la categoría, pero también señala que aunque no sea el objetivo tampoco hay que descartar la posibilidad de pelear por un ascenso a la Asobal.

Cuenta que el equipo se mantuvo al final de la pasada temporada, aunque han tenido algunas lesiones que les han mermado. Ahora es cuando empiezan a tener a todos, salvo los extremos derechos, y cuando deben estar mejor.

Cree que hay un equipo “competitivo” y con “mucha calidad” en la plantilla y que tienen que autoexigirse

Cuenta que él sigue compartiendo la portería con Juan Gamallo y que van “intercambiando la titularidad” y decidiendo ellos mismos en función de como ven las cosas “está dando réditos y estamos sacando máximo rendimiento”, dice y recuerda que es un puesto fundamental: “cuando la portería aporta, el equipo lo nota”.

Personalmente explica que se ve con más madurez y que estos años le aportan capacidad de análisis para “reconocer mejor los errores y los aciertos” y conocerse mejor e incluso la capacidad de “dar un paso atrás” cuando no sale el día o saber elegir con el compañero qué equipo se le va a dar mejor a cada uno en función de sus características.

Subraya que la División de Honor Plata ha dado un salto adelante y “ha subido de nivel”, con jugadores de Asobal que bajan, como Martín Doldán o Álvaro del Valle, por citar a dos ex del Huesca, y otros que suben como Frank Cordiés o Ignacio Suárez, y cree que eso hace que “el salto no sea tan grande” ahora entre ambas categorías.

Comenta que para él supone mucho poder compatibilizar la profesión de enfermero con el deporte, aunque a veces se acumula la carga de trabajo y entrenamientos. Y señala que en Ibiza, además, hay una especial demanda de enfermeros también porque el tema de los precios de la vivienda lo complica y a él es algo que el balonmano le resuelve.

Broto se va planteando el futuro temporada a temporada. Se encuentra a gusto en Ibiza en la situación en la que está y está agradecido por ello, pero no cierra la puerta a cambiar si surgen otras posibilidades o inquietudes.

Broto sigue al Bada Huesca, equipo en el que se ha formado y del que formó parte hasta hace dos campañas ,y ve mucho balonmano de Asobal.

Comenta sobre los oscenses que tienen un bloque de “jóvenes que a la larga van a aportar más”, otros como Miguel Malo que está en “su año y ha dado un paso definitivo” y gente veterana que aporta mucho como Dani Arguillas, Adri o Montoya. Y comenta que se han suplido bajas como la de Asier, que era notable.

Ha visto muchos partidos igualados, con algunos que se han escapado y cree que lo primero es atar la permanencia. Y valora también el aumento de afluencia de público a los partidos, algo que considera muy importante. Broto recuerda en ese sentido que en los chavales que practican el balonmano tiene que estar el futuro y para ser una ciudad de balonmano muchos años.

Broto ha aprovechado para pasar unos días en Navidad en Huesca, aunque ya está de vuelta a su trabajo de enfermero y le quedan aún unos días para reanudar los entrenamientos con el equipo.