La selección de Inés Bergua remata el Mundial de Valencia bañándose en plata
Las españolas realizaron unos 5 aros soberbios y fueron cuartas en el mixto

La selección española de gimnasia rítmica, capitaneada por Inés Bergua, ha rematado este domingo el Campeonato del Mundo de Valencia bañándose en plata con un soberbio ejercicio de 5 aros, que seguramente será el ejercicio más recordado del torneo por la afición patria.
La gimnasta oscense, Ana Arnau, Mireia Martínez, Patricia Pérez y Salma Solaun también han sido cuartas en la final de 3 cintas y 2 pelotas, una posición agridulce que no consiguió lastrar en absoluto el Mundial tan maravilloso que nos han regalado.
Aunque las juezas suelen ser más generosas con el equipo de casa, lo cierto es que a España se la ha puntuado con justicia en este campeonato, en el que todo lo que han conseguido las gimnastas ha sido 100 % justo y merecido.
Una de cal y otra de arena
Si el pasado viernes, día de la clasificación general, las españolas brillaron en este ejercicio de 5 aros, este domingo han vuelto a superarse con una ejecución un poco más pulida.
Más tranquilas que el primer día, las gimnastas de la selección nacional han disfrutado de cada detalle en este delicado montaje inspirado en la historia de Romeo y Julieta, que muchos de los aficionados nunca olvidarán por su extrema belleza.
Por esta soberbia actuación, España ha obtenido 36,100 (20,200 en Dificultad, 7,550 en Ejecución y 8,350 en Artístico), un nuevo récord en su trayectoria.
Con una presentación un poco más imprecisa que en la clasificación general, pero igualmente demoledora, China ha merecido el primer oro mundial de su historia con 36,550, mientras que Italia, que ha cometido varios errores, ha ganado el bronce con 35,850.
Han completado el top 8 de 5 aros Brasil (35,850), Israel (35,300), Polonia (34,700), Ucrania (31,800) y Francia (29,250).
En la segunda final, la de 3 cintas y 2 pelotas, España parecía la favorita para subir a lo más alto del podio, por aquello de que la composición estaba dedicada a Valencia y por lo bien que estaba realizando este ejercicio en las últimas semanas, pero lamentablemente se ha mostrado muy desubicada, aunque ha logrado salvar el ejercicio sin caídas.
Además de perder la sincronización en los giros fouettes, el conjunto ha hecho frente con éxito a una posible salida del tapiz, a un rebote de la pelota y a algún que otro desplazamiento, unos fallos que poco a poco exterminaban sus opciones y que le han dejado en la cuarta posición, pero muy lejos de la medalla.
Aunque las entrenadoras han considerado que la puntuación era baja y han pedido una revisión a las juezas, éstas no han cambiado su nota, que ha sido de 30,750 (15,700 en Dificultad, 7,050 en Ejecución y 8,000 en Artístico).
El oro de la final de 3 cintas y 2 pelotas ha recaído en Israel con 34,800, una nota colosal un tanto inmerecida.
Le han acompañado en el podio China (32,800), que con esta plata ha constatado su título como el conjunto más regular del torneo; y Ucrania (32,300), un país en guerra que se lleva dos bronces -hay que sumar el que ganó Victoriia Onopriienko en mazas- de Valencia, lo que demuestra definitivamente que sus ciudadanos y ciudadanas están hechos de otra pasta.
Por detrás de las españolas se han quedado Azerbaiyán (30,300), Japón (29,650), Bulgaria (29,650) y México (25,450).
A Bergua sólo le queda la gloria olímpica
Pese a que sólo tiene 19 años, Inés Bergua cuenta ya con una plata y cuatro bronces mundiales, además de una plata y un bronce europeos.
La única medalla que le falta en su exitoso currículo es la olímpica, que disputará el año que viene en París 2024, donde podría consagrarse como una de las deportistas aragonesas más exitosas de todos los tiempos.
Pase lo que pase, la oscense es ya una leyenda de la gimnasia rítmica española gracias a un talento y una capacidad de trabajo al alcance de muy pocas, que han dado lugar a un palmarés tremendo al que seguramente todavía le quedan muchos metales que sumar en el futuro.