La cantera peñista vuelve a entrenar en el Center

HUESCA.- El baloncesto volvió este lunes al Peñas Center dos meses y medio después de su cierre por la crisis sanitaria.

La cantera peñista regresó a los entrenamientos, aunque estos se han adaptado de forma rigurosa a los protocolos sanitarios debidos.

El coordinador de la cantera peñista, Carlos Lanau, explica que se trata de "retomar la actividad" y de volver a entrenar de la forma "más aproximada" posible al baloncesto, aunque admite que las restricciones obligan a hacer una actividad basada tanto en la preparación física como en la técnica individual.

El baloncesto real aún queda algo lejos, pues se evitan contactos, se mantienen distancias y ni siquiera se comparten balones. Cada jugador se manejará con un balón y no se compartirá material.

GRUPO MUY REDUCIDOS EN MEDIA PISTA

Los equipos como tal quedan fuera ahora mismo de esta actividad se han formado pequeños grupos de como mucho cinco jugadores que trabajarán en media pista. De ese modo, podrá haber al mismo tiempo cuatro de esos pequeños grupos, cada uno con un entrenador, en las dos pistas de la instalación.

Se han establecido tres turnos horarios entre las 17:30 y las 21:30, con sesiones de aproximadamente una hora en la que Lanau explica que hay que tratar de ser ameno dentro de la dificultad que implican las restricciones de la distancia entre jugadores.

La actividad está abierta para jugadores desde alevines hacia arriba. Se ha considerado que las limitaciones y los protocolos no eran los más idóneos para los benjamines.

Esta actividad está incluida en la cuota de los canteranos peñistas, pero también está abierta para aquellos niños que no sean de los equipos del club y deseen participar. Pueden contactar con el club a través del correo electrónico cbphuesca@cbphuesca.com.

La intención del club es mantener la actividad durante todo el verano, aunque se irá viendo en función de la evolución de la situación. Ahora mismo tampoco está descartada la posibilidad de realizar un campus veraniego, aunque, por ahora, se ve difícil.

El club ha establecido un protocolo para mantener las distancias y especialmente en las entradas y salidas, no haciendo coincidir las mismas y marcando también unos intinerarios señalados por el interior del pabellón. Todo ello, para ofrecer la máxima seguridad y también para poder desinfectar entre sesiones.

Y habrá que cumplir las normas de higiene habituales en esta situación, como la desinfección de zapatillas en el acceso, la limpieza de manos con gel a la entrada o el dejar los efectos personales de cada uno separados.