Bada Huesca, preparado para el reto tras un positivo enero

HUESCA.- Bada Huesca está consiguiendo cerrar un mes de enero normal, lo que supone la mejor noticia en su proceso de preparación de la segunda vuelta. El equipo está preparado para la batalla que tiene por delante: conseguir la permanencia. Pero antes de ello, afronta esta semana una eliminatoria de la Copa del Rey para entrar en la Final a 8 de la misma.

Después de una primera vuelta marcada por la excepcionalidad de las bajas constantes y los problemas físicos, el equipo necesitaba más que nunca poder trabajar en las condiciones idóneas durante este mes de enero.

Y es lo que ha podido hacer durante las cuatro semanas que llevará de preparación cuando este jueves reciba en el Palacio de Deportes al Liberbank Cuenca.

En los entrenamientos, el técnico José Nolasco ha podido tener a su disposición en la pista a la plantilla en pleno y prácticamente el único contratiempo que ha habido fue una leve lesión de Dani Arguillas y unas molestias de Jorge Broto que sólo afectaron a la portería, cubierta durante algunos entrenamientos por Pablo Casterad, portero del segundo equipo.

Pero en la pista ha habido de forma habitual diecinueve jugadores, lo que ha favorecido el trabajo táctico, pudiendo repartir repeticiones, consiguiendo un ritmo más elevado de trabajo sin sobrecargar a jugadores y pudiendo emplear a cada cual en las circunstancias que serán habituales durante los partidos, sin ajustes forzados por las bajas.

Con un poco de suerte, el encuentro contra el Cuenca de Copa será el primer partido de la temporada en el que el equipo esté al completo y el técnico incluso tenga que realizar descartes.

Hay que recordar que las convocatorias pueden entrar dieciséis jugadores, de los cuales dos deben ser de edad júnior, lo cual implica también determinados condicionantes.

LA MORAL MÁS ALTA

Es una circunstancia que también ha elevado la moral y la competitividad en el equipo, que ha sentido una fortaleza mayor del grupo.

Los encuentros amistosos también han salido bien y han servido tanto de cara a preparar los partidos, como para obtener resultados positivos, un empate con Granollers y una victoria con Billere.

Era lo de menos, pero para un Bada que venía de perder los cinco últimos partidos de liga, resultaba necesario romper la dinámica.

La moral del equipo sale reforzada de esta pretemporada, aunque tendrá que confirmarlo desde este jueves en el encuentro de Copa contra el Liberbank Cuenca.

Pero, desde luego, se ha podido frenar la dinámica peligrosa de antes del parón, cuando el equipo pedía a gritos que llegará el final de la primera vuelta.

Y el técnico tiene ahora muchos más recursos en la plantilla, pese a que no se ha producido más que una incorporación. Nolasco cuenta con Sasha Tioumentsev para el puesto de central como novedad, pero también cuenta con Joao Pinto, tras su recuperación, y están en mejores condiciones para aportar jugadores como Iván Montoya o Gerard Carmona, que participaron poco en la primera vuelta por sendas lesiones y otros, que habían arrastrado algún problema físico en algún momento de la temporada o habían acabado la primera vuelta sobrecargados.