Fútbol

tercera división

La mala suerte vuelve a castigar a un gran Sabiñánigo

Los serrableses perdonaron en la primera parte ante un Utebo que acaba tercero

Los jugadores del Sabiñánigo celebran uno de los goles.
Los jugadores del Sabiñánigo celebran uno de los goles.
Andrés Alcaraz

Sabiñánigo 2

Utebo 3

Sabiñánigo: Iván, Toro, Gorgas (Goez, minuto 90), Cabrero, Alcoba, Villar, Muñoz, Grasa, Ángel Luis (Villalba, minuto 70), Ortiz y Paco Blasco (Ferruz, minuto 80)

Utebo: Aarón, Capapé, Cavero, Félez, David Marín (Guillermo, minuto 78) (Alvira, minuto 90), Osanz, Lafita, Héctor (Castelreanas, minuto 62), Ramón (Aznar, minuto 60), Cardo y Baldres.

Goles: 0-1 Minuto 15: Baldres. 1-1 Minuto 24: Cabrero.2-1 Minuto 52: Muñoz. 2-2 Minuto 75: Baldres. 2-3 Minuto 90: Baldres.

Árbitro: Haghiac. Amarillas a los locales Goez, Cabrero, Ferruz, Muñoz y Alcoba, además del fisio Diego Gracia, y a los visitantes Félez y Guillermo.

El Sabiñánigo volvió a jugar como nunca, pero perdió como siempre. Pese a realizar la primera mejor primera parte en lo que va de temporada, los serrableses siguen peleados con la mala suerte. Al final de los 45 minutos, el resultado marcaba el 1-1, pero la definición en la última jugada a puerta vacía ha llevado al Sabi a perder un partido que podía haber finiquitado en el primer tiempo. Blasco, Muñoz y Villar fueron los protagonistas de los tres goles que podrían haber subido y no subieron. Solo Cabrero había acertado poco después de que Baldres hubiera hecho su primer tanto del Utebo.

En la segunda parte, el Sabiñánigo seguía insistiendo, hasta que llegó el segundo gol, materializado por Muñoz, con el que parecía que el partido estaba ganando. Sin embargo, un poste que podría haber aumentado la ventaja en el marcador, un penalti no sancionado por el árbitro y la mala fortuna con un rebote, dejó al cuadro serrablés con derrota. Una vez con el 2-3 en el marcador, el Utebo levantó la polémica al pedir un cambio y tardar tiempo en hacerlo, lo cual encendió a banquillo local y desencadenó en una tangana que el árbitro zanjó con tarjetas amarillas.