SD Huesca

TRIBUNALES

El Huesca recibe cuatro millones por el Caso Ghoddos

La FIFA da la razón al club azulgrana en la demanda al jugador iraní

El Huesca recibe cuatro millones por el Caso Ghoddos
El Huesca recibe cuatro millones por el Caso Ghoddos
S.E.

HUESCA.- La FIFA ha fallado que el Huesca debe ser compensado con cuatro millones de euros por el fallido fichaje del futbolista sueco-iraní Saman Ghoddos. Como se recordará el club ha defendido siempre la validez del contrato suscrito por el jugador en agosto del año pasado, un acuerdo rubricado que luego rompió para fichar por el Amiens, de la Primera División francesa.

El Huesca recurrió a la FIFA que ha fallado en primera instancia en su favor y que, además, sanciona al jugador con cuatro meses de suspensión y al club de origen, el Ostersunds de Suecia a dos periodos de ventanas de fichajes sin poder incorporar jugador alguno.

El club ha emitido un comunicado que dice así:

"El Gabinete Jurídico de la Sociedad Deportiva Huesca, dirigido por su Consejero Delegado Manuel Torres, entrega al club una callada victoria en los tribunales. El organismo decisor de la Federación Internacional de Fútbol decide aceptar en lo sustancial el argumento defendido por los abogados del Huesca, sanciona al futbolista Saman Ghoddos con cuatro meses de inhabilitación deportiva; con dos periodos de fichaje sin poder habilitar ninguna incorporación al equipo del que provenía el jugador, Club Ostersunds FC, de Suecia; y fija una compensación de cuatro millones de euros (4.000.000) para la Sociedad Deportiva Huesca a recibir en un plazo no superior a treinta días.

El tribunal federativo fija un margen de 21 días por si los sancionados deciden recurrir, algo perfectamente previsible, pero que no excluye el que el volumen de las sanciones aún fuera aumentado.

A expensas de esa posibilidad, concluye un tiempo de trabajo en silencio que es característico de la Sociedad Deportiva Huesca, de su Gabinete Jurídico y de todos los demás componentes del club. No procede distraerse en respuestas puntuales a quienes, llevados por el desconocimiento, el exceso de afecto o la mala intención, juzgan al primer bote sin dejar jamás que el balón llegue al suelo. La calma y la razón son buenos compañeros para obtener justicia".