SD Huesca

FÚTBOL - JORNADA 35

Míchel confía en "dar un golpe sobre la mesa"

El técnico define al Cádiz como "el mejor equipo de la categoría a día de hoy"

Míchel confía en "dar un golpe sobre la mesa"
Míchel confía en "dar un golpe sobre la mesa"
LALIGA

HUESCA.- El Huesca recibe al Cádiz y Míchel Sánchez afronta el partido con la confianza de “dar un golpe sobre la mesa” ante el que considera “el mejor equipo” de Segunda División por el momento. El entrenador azulgrana considera que su equipo deberá “salir buscando los tres puntos” en un encuentro que ve como “una final con matices”.

El madrileño ha afirmado este martes que el cuadro oscense está “con toda la ilusión del mundo” ante el que posiblemente sea “el partido más importante disputado hasta ahora, primero porque es el siguiente y, segundo, porque viene el mejor equipo de la categoría”, lo cual obligará a los suyos a mostrar su mejor versión.

“El Cádiz ha demostrado que a día de hoy es el que mejor hace las cosas, es un proyecto a largo plazo, con un entrenador que lleva muchos años en el club, que tiene una manera de jugar muy identificada y que lo hace a la perfección. Es un partido de máxima exigencia para nosotros, pero queremos estar en disposición de luchar por todo y necesitamos salir buscando los tres puntos y siendo el Huesca”, ha explicado el míster, que ha recordado que ante un contrincante así no pueden “tener ningún altibajo dentro del partido porque es un equipo que te penaliza mucho”.

Míchel ha remarcado que el conjunto gaditano lleva “muchos años con Álvaro Cervera, un técnico con las ideas muy claras, que su equipo las ejecuta a la perfección, saben lo que hacen y lo hacen muy bien, pro eso van líderes y han estado en la primera posición mucho a lo largo de la temporada”. De ahí que “la exigencia es máxima” para los azulgranas, que deberán imponer su “estilo” al de su rival.

Además de esa exigencia, el preparador madrileño ha incidido en que el Huesca también debe tener ilusión y humildad. Lo primero, ha afirmado, lo tienen, sobre todo “después de remontar un partido que se puso muy cuesta arriba” en Albacete. “El equipo tiene ganas de afrontar el partido y de verse en el máximo nivel para ver si somos capaces de llegar a donde están Cádiz, Zaragoza, Almería, ser capaces de estar con ellos en la pelea y eso pasa por el partido de mañana (por el miércoles)”.

El técnico ha agregado que “la exigencia es buena, pero lo es más la humildad” y, bajo su punto de vista, el conjunto oscense es “un equipo muy humilde, como el resto de la categoría”. “Cada partido y cada punto que juegas vale muchísimo, cada victoria que consigues es un gran paso hacia adelante, es lo que tenemos que entender. Nosotros como equipo no podemos perder la humildad, no tenemos que ser un equipo que tenga la exigencia de ganar por encima de los demás, queremos ganar y pelear por todo, pero el resto de los equipos también juega, no somos superiores a nadie y tenemos que plantarnos con humildad en el terreno de juego para hacer nuestro cien por cien, dar nuestra mejor versión y ser capaces de estar arriba”.

Estar en la zona alta es lo que ha “hecho toda la temporada el Huesca”, por lo que deben “seguir por el mismo camino”, ya que “en esta categoría nadie te regala nada”. Por ello, Míchel ha manifestado que se encuentran “en una buena posición, pero peor” de la que desean. “Me gustaría estar en los dos puestos más avanzados de la clasificación, pero estamos donde estamos porque hemos hecho bien las cosas”.

Y acercarse a esas dos primeras plazas pasa por vencer al Cádiz en “una final con matices”. “Es una final porque necesitamos los tres puntos, pero hay pequeños matices porque veremos lo que hacen los demás para ver si podemos seguir vivos o no, así que la idea es buscar los tres puntos porque son muy necesarios, el equipo sabe que nos jugamos mucho y es el momento de dar el golpe encima de la mesa”, ha señalado el madrileño, que ha asegurado que no va a “forzar a nadie” al contar con “alternativas”, ya que salvo Dani Raba, lesionado, “el resto de la plantilla está bien y en disposición de poder competir”.

Míchel se ha mostrado resignado por que la afición no pueda acompañar al equipo dentro de El Alcoraz, pero ha afirmado que se tienen que “adaptar” para que no se escapen más puntos como local. “En casa nos hemos hecho fuertes y tenemos que seguir por la misma línea. Dentro de la adaptación que tengamos, es importante saber que no vamos a tener a nuestra gente en momentos nuestros de debilidad o en los que el rival haga las cosas bien y nos pueda superar, y tenemos que estar muy concentrados para saber reponernos de esas circunstancias, porque muchas veces, en los momentos malos, El Alcoraz nos ha levantado y ahora tenemos que hacerlo individualmente porque no vamos a poder tener su apoyo”.