Portillo y Chema, del Getafe, objetivos del Huesca

HUESCA.- Los jugadores del Getafe Chema Rodríguez y Francisco Portillo se encuentran en la lista de objetivos del Huesca para reforzar la plantilla de cara a la vuelta del equipo a Primera División en la temporada 2020/2021. El primero es central zurdo y el segundo, un centrocampista polivalente diestro, y ambos cuentan con experiencia en la máxima categoría del fútbol español.

Portillo, de 30 años (Málaga, 13/6/1990), puede jugar por detrás del delantero, en las bandas e incluso como interior. El malagueño cuenta con 172 partidos en Primera División con Málaga, Betis y Getafe, que hace tres años desembolsó 1,5 millones de euros al club verdiblanco y con cuyo contrato expira el próximo verano.

Se formó en El Palo antes de pasar al Málaga en categoría cadete. Como boquerón, debutó en Primera a los 19 años jugando 16 minutos contra el Real Madrid en la campaña 09/10 y, el curso siguiente, se consolidó en el primer equipo al disputar 17 encuentros de liga y otros tres de Copa del Rey. En la 11/12 apenas gozó de protagonismo (dos choques ligueros y uno copero), pero en la 12/13 participó en 27 partidos de Primera (veinte de inicio y dos goles), además de otros ocho en Liga de Campeones y tres en Copa (un gol).

Tuvo otras 25 citas en liga (tres goles) y dos de Copa en la 13/14, pero en la siguiente apenas jugó en dos partidos del torneo del K.O. y fue cedido en enero al Betis, con el que disputó 21 encuentros en Segunda y ascendió a Primera. Los verdiblancos se hicieron con sus servicios por un millón de euros y, tras una temporada en Primera con 19 partidos en liga y cuatro en Copa, fue cedido al Getafe. De azulón logró un nuevo ascenso, siendo un pilar importante: 37 partidos y cuatro tantos.

El club madrileño lo compró por 1,5 millones de euros y, tras dos años en la categoría reina del fútbol español acumulando muchos minutos (33 y 32 partidos respectivamente), en esta última temporada su participación ha disminuido considerablemente: 16 encuentros de liga, solo tres como titular, más cinco en Liga Europa y uno en Copa.

Por su parte, Chema llegó al Getafe en enero de este año procedente del Nottingham Forest inglés, donde durante la primera mitad del curso compartió vestuario con el azulgrana Rafa Mir. El central, de 28 años (Caudete, Albacete, 3/3/1992) firmó hasta el 30 de junio de 2023, pero a las órdenes de José Bordalás solo ha participado en cuatro encuentros. Antes, en la Championship (segunda categoría en Inglaterra), jugó ocho partidos de liga y dos de Copa de la Liga.

Antes, Chema, que se formó en el Caudete, Kelme y Elche, pasó por los dos filiales del Atlético de Madrid entre 2011 y 2014, cuando firmó con el Alcorcón, con el que disputó tres temporadas en Segunda División: nueve partidos (un gol) en la 13/14, 23 en la 14/15 y 33 en la 15/16. Su buen hacer como alfarero, con cinco tantos en su último curso, le valió para que el Levante pagara 850.000 euros por él y, en su primer año de granota, logró el ascenso a Primera (la misma temporada que Portillo con el Getafe).

El central disputó 33 partidos esa campaña, en la que anotó tres goles, y los dos cursos posteriores en Primera siguió teniendo minutos. Hace tres temporadas, jugó 25 choques de liga y dos de Copa y hace dos, otros 19 ligueros y dos coperos. El Nottingham pagó medio millón de euros para hacerse con él el pasado verano y, seis meses después, recaló en el Getafe por el triple de precio.

Se trata de dos de las opciones que baraja la dirección deportiva del Huesca para completar el equipo de cara al curso que, en principio, comenzará en un mes, pero el club se mueve con cautela en un mercado que no está avanzando dada la crisis que ha afectado a todos por el coronavirus y a que se alargue el final de la temporada, ya que todavía deben disputarse los play offs de ascenso a Primera.

Por todo ello, la entidad oscense no pierde de vista las varias opciones que tiene en lista para reforzarse. Se busca un portero, dos centrales, un lateral derecho, un centrocampista defensivo, otro con un perfil más atacante, dos o tres extremos y un delantero. Pero el Huesca está a la espera de que se inicien los movimientos y no se precipitará. De hecho, se recuerda el mercado de verano del año pasado, en el que gran parte de los fichajes tardaron en llegar, pero lo hicieron, se formó un equipo competitivo y se cumplió el objetivo del ascenso. Sin prisa, pero sin pausa.