SD Huesca

FÚTBOL - SEGUNDA DIVISIÓN

Una temporada que deja lecciones para aprender

La 21/22 empezó torcida para el Huesca desde el shock del descenso de Primera

El Huesca dejó escapar 33 de los 63 puntos que se jugó en El Alcoraz.
El Huesca dejó escapar 33 de los 63 puntos que se jugó en El Alcoraz.
Javier Navarro

Lecciones para aprender. Eso es lo que ha dejado una temporada que ni se ha acercado a lo esperado ni, por supuesto, a lo deseado en la Sociedad Deportiva Huesca. Y todo empezó con el estado de shock que dejó el descenso a Segunda el 22 de mayo del año pasado. Los azulgranas, después de remontar su situación de la primera vuelta, bajaron en la última jornada pese a depender de sí mismos.

Desde entonces, son muchos los fallos y las situaciones negativas que se han vivido y muy pocos los aspectos positivos que se pueden destacar. No comenzaba bien el curso 2021/2022 para la entidad, con unas equipaciones que perdían la esencia del club (dolorosos fueron los adiós a las rayas azulgranas de la primera camiseta y, sobre todo, a la cruz de San Jorge de la segunda) y que generaron el descontento de la hinchada, y con la llegada de un entrenador, Nacho Ambriz, que era una apuesta exótica y, sobre todo, fue muy tardía: se anunció su llegada el 28 de junio, pocos días antes de que tuviera que iniciarse la pretemporada.

La noticia supuso un ‘boom’ en México, país en el que aumentó desmesuradamente el seguimiento del Huesca. No tuvo fácil su primera experiencia como primer técnico en Europa Ambriz, ya que completó prácticamente toda su estancia con la mitad de la primera plantilla que iba a afrontar la temporada.

Muchos fichajes se cerraron justo antes del inicio de la liga o incluso con dos o tres jornadas disputadas, lo cual derivó en que a algunos jugadores les costara más de lo habitual coger la forma. Y el plantel que quedó tampoco fue muy completo, hasta el punto de que Cristian Salvador, centrocampista, tuvo que ejercer de defensa varios encuentros ante la falta de centrales. Ignasi Miquel llegó tarde y lejos de su cien por cien y Pablo Insua estaba lesionado de gravedad. El capitán, Jorge Pulido, era el único disponible.

Luego está el experimento de los delanteros: Adolfo Gaich e Isidro Pitta fueron los fichajes del Huesca y estaban llamados a poner los goles, pero no fue así. Ambos se estrenaban en el fútbol español y el primero ha acabado con un gol y el segundo, que en enero se fue cedido a Brasil, con dos. Al final, Dani Escriche, que parecía partir como tercer punta, ha sido el titular indiscutible.

El Alcoraz no fue un fortín

Uno de los principales problemas del Huesca fue que, a diferencia de lo que acostumbra en la categoría, El Alcoraz no fue un fortín. Más bien lo contrario. Y eso que el cuadro oscense ganó sus dos primeros compromisos ligueros, ambos en su estadio ante Eibar y Cartagena y con un fútbol alegre y de ataque.

Sin embargo, ese arranque fue un espejismo que además generó una sensación de que los azulgranas iban a ser uno de los rivales a batir esa temporada. En toda la primera vuelta, el Huesca sólo se llevó los tres puntos en un choque más como local (ante el Valladolid el 3 de diciembre). No fueron mucho mejores los números en la segunda mitad del curso: sí sumó más puntos el equipo en El Alcoraz, pero sólo cosechó cuatro triunfos más. En definitiva, de 63 puntos que hubo en juego en su estadio, los anfitriones sacaron 30. Ni la mitad.

La irregularidad ha sido la nota imperante en la temporada de un Huesca que, quitando las primeras jornadas por esas dos victorias en casa, ha vagado por la zona media de la tabla de principio a fin cuando estaba llamado a ser uno de los equipos fuertes de la categoría. En las dos primeras jornadas fue líder, en la tercera bajó al cuarto puesto y después no pasó del séptimo. De hecho, desde la octava, el conjunto oscense nunca ha pasado de la novena posición, no ha bajado de la decimoquinta y ha acabado decimotercero.

Y es que el equipo no fue capaz de enlazar tres triunfos seguidos. El cambio de entrenador tampoco dio el efecto deseado. Con Xisco Muñoz, el Huesca sólo tuvo una fase, entre la jornada 32 y la 36, en la que se vio con opciones de alcanzar la sexta plaza, pero el empate en el derbi enteró esas opciones. Xisco anunció tras ese encuentro que no seguiría y, en los seis últimos partidos, el equipo se dejó llevar, dejando una sensación de indiferencia en la afición. La mejor muestra, un Alcoraz que presentó su peor entrada en el último partido, que suponía además la despedida de Mikel Rico. Lo mejor de la temporada del Huesca ha sido, en definitiva, que ha acabado.