SD Huesca

FÚTBOL - SEGUNDA DIVISIÓN

Rico, un regreso especial

El centrocampista, tranquilo hasta que no toque “ir al vestuario visitante”

El jugador vasco, en un entrenamiento con el Cartagena.
El jugador vasco, en un entrenamiento con el Cartagena.
S.E.

El pasado 21 de mayo, la SD Huesca echó el cierre a la temporada como local con victoria por 3-2 contra la Real Sociedad B. Fue el último de los 184 partidos de Mikel Rico con la camiseta azulgrana, en el que portó el brazalete de capitán y acabó manteado por sus compañeros y ovacionado por la afición oscense.

Y este domingo 21 de agosto, justo tres meses después, el centrocampista vasco regresará al Alcoraz, ahora como jugador del Cartagena. “Hasta que no llegue al Alcoraz, entre, y en vez de ir para la derecha vaya para la izquierda al vestuario visitante, estoy tranquilo”, afirma Mikel Rico en la entrevista para Diario del Altoaragón.

“Va a ser un partido complicado, todos sabemos lo bien que trabaja el Cuco sus plantillas, defensivamente son equipos complicados para meterles mano y que transitan bien por el campo, va a ser un partido disputado y complicado para los dos”, añade.

De la mano de Mikel, el Huesca ha vivido los años más gloriosos de su historia. Los ascensos a Segunda y Primera son momentos que quedarán para siempre en la retina del de Basauri, que recuerda “con mucho cariño” sus etapas como azulgrana. La temporada pasada tomó la difícil decisión de abandonar el club “para seguir disfrutando de lo que más me gusta”. De esta forma, llegó en verano al Cartagena. “Ha sido bastante sencillo adaptarme, entre todos han hecho que los nuevos nos integremos muy rápido y hemos encajado todos muy bien, tanto con el cuerpo técnico como con los compañeros. Para mí ha sido un poco especial, porque llevaba 9 años en Bilbao y Huesca, ciudades que conocía con gente que conocía, y llegar aquí ha sido como volver a cuando tenía 24 años”.

Allí no ha podido comenzar con mejor pie, y es que tras más de año y medio desde su último gol con el Huesca, Mikel consiguió anotar el primer tanto cartagenero de la temporada en el día de su debut ante la Ponferradina. “Aunque perdimos, tuve la suerte de hacer gol. Hacía bastante que no metía y más para alguien como yo que suele llegar bastante al área. Aunque no soy delantero, quitarme ese gusanillo de marcar me vino muy bien”, afirma.

A sus 37 años, el centrocampista ha convencido a Luis Carrión para partir como titular y ha tenido que reinventarse. “El jugador va evolucionando a medida que va aprendiendo ciertas cosas y le van cambiando las características físicas, entonces te vas adaptando a tu nuevo estilo de juego. Tienes que ser un poco listo y, sin perder tu esencia, adaptarte a lo que te pide el entrenador para poder contar con los máximos minutos”, asegura.

Sigue muy de cerca al Huesca, sin ir más lejos vio entero el primer partido contra el Levante y ha hablado con sus ex compañeros para conocer de primera mano cómo se están desarrollando las cosas por la capital oscense. “La verdad que están muy contentos con el nuevo cuerpo técnico, Cuco se ha hecho rápido con el vestuario, es un tipo inteligente, pero sobre todo es un buen tipo. Cuando eres así, a la gente te la ganas rápido con tu manera de ser y de trabajar”.

Este domingo Mikel no llegará solo al Alcoraz, de entre toda la expedición del Cartagena destacan además los nombres de Damián Musto y David Ferreiro. El gallego abandonó el Huesca en verano tras 6 temporadas como azulgrana y el centrocampista asegura que “será para ambos un partido muy especial”. Para Mikel “el Huesca es el Huesca” y solo tiene palabras de agradecimiento para el club. “Me han dado mucho durante toda mi carrera, no solo al principio, sino también ahora al final. He dejado muchos compañeros y amigos allí, les deseo lo mejor, de corazón”.

Este domingo, el capitán volverá a reencontrarse con un equipo y una afición que le han marcado para siempre y que seguro le recibirán con el mismo cariño con el que le despidieron.