SEGUNDA DIVISIÓN
Competir para poder ganar
La SD Huesca suma dos empates y una derrota en este inicio abrupto de temporada, siendo uno de los equipos que menos dispara a portería

La Segunda División no espera a absolutamente nadie una vez comenzada una nueva temporada. En ella, la SD Huesca sigue mirándose a sí misma, trabajando en muchos conceptos a mejorar y, sobre todo, lograr cuanto antes la primera victoria del curso que dé una mayor confianza a los pupilos del Cuco Ziganda.
No ha sido un comienzo fácil para el conjunto azulgrana, que ha sido incapaz de empezar con buen pie por segunda temporada consecutiva y con muchas dificultades ante los rivales a los que se ha enfrentado en los primeros partidos, firmando hasta ahora dos empates y una derrota. Hay que decir que el Huesca tampoco fue capaz de sumar ninguna victoria en las tres primeras jornadas de liga del curso anterior, y que también es cierto que, por números, el arranque fue peor, con tan solo un punto de nueve posibles respecto a los dos obtenidos en la recientemente comenzada.
No obstante, quedan 39 jornadas por delante para remediar un situación que por ahora no se antoja nada fácil, pues una vez superadas las tres primeras semanas de competición el Huesca se encuentra entre los cuatro únicos equipos que no conocen todavía el triunfo junto al Albacete, el Oviedo y el Cartagena como acompañantes actuales en la zona baja de la clasificación. Dadas las alturas a las que se encuentra la liga actualmente resulta anecdótico, pero la SD Huesca se encuentra por ahora en vigésima posición.
Una victoria que se antoja más que necesaria
A pesar de ello, lo más positivo de todo son las sensaciones que dejó el conjunto azulgrana el pasado lunes en El Sardinero, con una imagen muy distinta a la ofrecida ante el Burgos y el Tenerife en las dos primeras fechas. Los de Ziganda compitieron de igual a igual al equipo de José Alberto, un paso obligatorio para seguir creciendo y, por ende, estar cada vez más cerca de los tres puntos que tanto van a hacer falta semana tras semana.
No solo basta con mostrar competitividad y cierta solidez defensiva, también generar peligro. Algo que todavía les cuesta a los azulgranas y que por desgracia arrastran de la pasada temporada. Tal es su dificultad a la hora de anotar que, hasta ahora, tan solo llevan un gol a favor y tres en contra, siendo además uno de los equipos que menos genera y menos disparos a puerta ha realizado hasta el momento.
El duelo contra el Mirandés el próximo domingo en El Alcoraz (21:00 horas) será una nueva prueba para dejar atrás los fantasmas de los choques anteriores y, conseguir de una vez por todas, la primera victoria del curso que aleje al equipo de la zona roja.