Huesca

PANDEMIA DE CORONAVIRUS

José Puzo: "El virus va a estar con nosotros bastante tiempo, así que cuidado"

El reducido número de personas que se ha contagiado hace que el riesgo permanezca

José Puzo: "El virus va a estar con nosotros bastante tiempo, así que cuidado"
José Puzo: "El virus va a estar con nosotros bastante tiempo, así que cuidado"
P.S.

HUESCA.- Durante las últimas semanas viene siendo de uso habitual en el argumento de las autoridades para llamar a la prudencia el dato de la baja inmunidad general de la población. Lo hizo, por ejemplo, el alcalde de Huesca, Luis Felipe, cuando explicó las razones para suspender las fiestas de San Lorenzo: se estima que en la provincia, apenas un 4,1 % de la población ha debido de pasar la enfermedad, con síntomas o sin ellos, y con un desarrollo de desigual gravedad.

En esta situación, la capacidad de contagio sigue siendo elevada porque aún queda muy lejos que los epidemiólogos denominan "inmunidad del rebaño", tras un contagio natural de una amplia mayoría de la población o la vacunación generalizada. Así lo indica a este Diario el jefe del Servicio de Análisis y Bioquímica Clínica de San Jorge, el doctor José Puzo, quien advierte de que "el virus va a estar con nosotros bastante tiempo porque la vacuna va a tardar". "Así que cuidado", señala a modo de aviso precautorio.

El dato indicado, que sube al 5 % en el conjunto de la población española, se extrae de un trabajo en fase de desarrollo del Instituto Carlos III. Un equipo de investigadores ha estudiado una muestra de unas 60.000 personas (algo más de 1.100 en la provincia de Huesca) para establecer la población total que pudiera haber pasado ya la enfermedad. El avance de resultados, con ese 4,1 % en Huesca, supone que en la provincia unas 9.000 personas han sido contagiadas.

Hay que advertir de que los resultados habitualmente manejados desde el inicio de la pandemia para hablar de positivos por covid son los conocidos como PCR. "El PCR es una técnica para encontrar que el virus está dentro de ti", señala el doctor Puzo. "Te dice si es positivo o negativo a partir de un número determinado de copias del virus".

Esto es, en el momento en el que una persona entra en contacto con el virus y se infecta, este comienza a replicarse en el organismo. La técnica PCR a partir de muestras tomadas en las vías respiratorias altas (la nariz, por ejemplo), determina si una persona tiene el virus cuando se halla un determinado número de réplicas del mismo.

Distintos son los estudios de seroprevalencia, utilizados con toma de muestra de sangre en los conocidos como "test rápidos" y que buscan las inmunoglobulinas en el suero del organismo. Se trata de los anticuerpos que el organismo genera para combatir el virus.

"El estudio de la Carlos III trata de rastrear en la sangre de personas los anticuerpos o inmunoglobulinas, las herramientas que el organismo infectado desarrolla para combatir el virus", apunta el doctor Puzo. "Son de dos tipos, las IGM y las IGG". "Las IGM se desarrollan cuando el virus está contigo o se acaba de ir y las IGG cuanto está contigo, pero que se quedan un tiempo después de que el virus se haya ido". Por tanto, "puedes tener IGG y no tener el virus y entonces estás claramente protegido".

Los "test rápidos" utilizados, y cuya eficacia se ha ido perfilando con el paso de las semanas, son técnicas similares a las pruebas de embarazo o drogas de abuso. "Se utilizada la inmunocromatografía, en la que aparece un color cuando está el anticuerpo en la sangre", explica.

José Puzo señala las personas en las que se ha detectado las IGG se han inmunizado por un tiempo. "Esta gente, por lo menos en unos meses, aunque no se sabe cuánto tiempo, está protegida", apunta Puzo quien precisa que "hay pocos virus que dejen inmunidad de por vida".

Los resultados ofrecidos por el Instituto Carlos III son un avance del estudio, en el que progresará el equipo investigador precisamente siguiendo la evolución de las IGG.

Los datos no han sorprendido al doctor Puzo, quien señala que vienen a coincidir con la situación apuntada en otros países en los que se han ofrecido datos sobre las inmunoglobulinas en sangre. Significa que "la mayoría de las personas infectadas, entre el 80 y el 90 % desarrollan síntomas muy leves y que alrededor del 10 % de los pacientes que tienen contacto con el virus desarrollan la enfermedad; y a lo mejor la mitad de estos con una gravedad que requiere a veces ingresos", explica Puzo. Hay que señalar que la mortalidad es elevada. Está en torno al 1 % ó 1,1 % ; un dato alto. El jefe de Análisis de San Jorge utiliza un símil muy gráfico para hablar de esta condición del SARS-CoV-2: "Cuando vamos a operar a alguien y tiene un riesgo del 1 % de mortalidad, lo explicamos, tiene que firmar un consentimiento informado".

En todo caso, queda bien claro que estamos "muy lejos de la inmunidad de la población; se necesita dicen los epidemiólogos un 60 ó 70 %". Con estas cifras de personas inmunizadas, el resto de la población quedaría automáticamente protegida porque se terminarían los contagios.

En este punto, es clave la vacuna: "La vamos a necesitar y están trabajando laboratorios de forma colaborativa, el problema es que en menos de dos años es difícil". La razón es la necesidad de cumplir unas fases protocolizadas que requieren plazos establecidos.

José Puzo advierte de que se trata de un virus muy contagioso "y sobre todo si no se ponen barreras, como el uso de mascarillas, evitar toser cerca de otras personas, la distancia".

Los centros de mayores y los centros sanitarios han sido dos ámbitos principales de contagio, que considera en principio lógico; en un caso debido a la convivencia en un mismo centro de muchas personas y en el otro, en razón a la "carga viral" de pacientes atendidos en hospitales y por personal de atención primaria. Una mayor protección de los sanitarios desde el principio hubiera evitado el alto número de contagios, pero el riesgo cero no existe debido precisamente a al concepto de "carga viral", el número de copias o réplicas del virus que se desarrolla en el organismo.

"NOS ESTAMOS OLVIDANDO DE LO QUE HEMOS PASADO"

El Colegio Oficial de Médicos de Huesca manifestó este lunes que aunque la pandemia va retrocediendo y las hospitalizaciones cada vez son menores hay que tener "mucho cuidado".

Así lo puso de manifiesto el presidente de esta entidad colegial, José María Borrel, quien manifestó que "nos estamos olvidando demasiado deprisa de todo lo que hemos pasado".

El presidente del Colegio Oficial de Médicos de Huesca señaló que en "toda esta socialización que estamos viviendo ahora, y que por supuesto va a ir a más, o mantenemos las medidas higiénicas o puede ser un motivo para que haya un rebrote", advirtió.

En esta línea reconoció que la pandemia va cediendo pero planteó que hay que tomarse con "precaución" y "cautela" este retroceso. "Actualmente todas las personas somos susceptibles de ser transmisores del virus, aunque no tengamos clínica", señaló el presidente, que apuntó que este aspecto "parece que se nos ha olvidado también".

Por su parte, Ramón Boria, miembro de la Junta de Personal del sector Huesca y médico del Centro de Salud Santo Grial, señaló que efectivamente actualmente hay menos casos detectados de coronavirus, lo que se refleja en los ingresos en los centros hospitalarios.

Pero remarcó que la Dirección General de Salud Pública y el Servicio Aragonés de Salud (Salud) ahora piden "muchísimo más rigor" ante cualquier sospecha de paciente afectado por la covid-19.

Esta medida se debe a que en plena desescalada existe cierto temor a que se produzca un nuevo brote de coronavirus y de que la pandemia vuelva a dispararse.

Según datos aportados este lunes desde el Gobierno de Aragón, la provincia de Huesca mantenía estabilidad en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI). Precisamente, este lunes en e Hospital San Jorge de Huesca se encontraban ingresadas 8 personas, de las que 3 estaban en la UCI.

En el Hospital de Barbastro había 17 pacientes afectados por coronavirus ingresados, de los que 3 estaban en cuidados intensivos.

Estas cifras son mucho menores a las registradas en ciertas semanas de la pandemia cuando, por ejemplo, el 7 de abril, en el Hospital San Jorge llegó a haber 46 pacientes covid ingresados en planta y 11 en la UCI por esta misma causa.