Ángel García Bernués: "Es escandaloso que la justicia haya estado completamente paralizada"

HUESCA.- El decano del Ilustre Colegio de Abogados de Huesca, Ángel García Bernués, critica la paralización absoluta de la justicia durante todo el estado de alarma por la crisis sanitaria causada por la covid-19, mientras otros sectores sí han estado en marcha, provocando que al habitual retraso se sume una avalancha de nuevos casos relacionados con la pandemia, y desvela las dificultades y múltiples dudas ante la vuelta a la normalidad del sector.

La justicia se enfrenta a dos graves problemas: por un lado, que pronto empezarán a señalarse juicios sin que se hayan establecido aforos máximos y, por otro, que se va a incrementar la actividad judicial sin que se hayan realizado evaluaciones de riesgo de tareas tan comunes como la práctica de diligencias fuera de la sede judicial, el uso de las salas de vista o el manejo de expedientes.

Está previsto que la Administración de Justicia, en su particular desescalada, continúe en fase 2, según dicta la Comisión de Coordinación de Crisis de la covid-19 en Justicia, en la que participan el Ministerio, las doce comunidades con competencias, el Consejo General del Poder Judicial y la Fiscalía General del Estado, con la reincorporación a su puesto de trabajo de entre el 60 y el 70 % de las plantillas en turnos de mañana o tarde para evitar aglomeraciones y dejará para el 9 de junio la fase 3.

Según explica Ángel García Bernués, "lo fundamental en justicia es que se reanuden los plazos procesales y se levanten las suspensiones de prescripciones y caducidades" a partir de esta semana que empieza, es decir, que "se pretende que la actividad judicial vaya cogiendo el pulso de verdad a partir del 4 de junio, además, a partir de hoy, lunes, comenzarán los plazos administrativos". Para lo cual, el Real Decreto-ley 16/2020, de 28 de abril, ha establecido distintas medidas procesales y organizativas, así mientras unos plazos volverán a computarse desde su inicio otros, como en el caso de los recursos de apelación, tendrán el doble de días.

Por tanto, este jueves será una fecha clave pero no la definitiva ya que, en opinión de Ángel García Bernués, no será una vuelta completa porque "los señalamientos tardarán en hacerse, o se hacen por videoconferencia, para lo que no hay medios, y, por su puesto, no es lo deseable". Asegura que lo único que surge con esta desescalada son dudas "porque, por ejemplo, en la vista de un juicio penal, ¿el acusado dónde tiene que estar?, ¿en su casa?, ¿en otro juzgado?, ¿estará solo? y ¿los testigos estarán juntos?".

Y es que revela García Bernués que las vistas por videoconferencia, a los abogados les plantean muchos problemas de garantías procesales y de defensa. "Aparte de que técnicamente nos creíamos que íbamos en Ferrari y no es verdad, la carcasa era de Ferrari, pero no el motor. No tenemos capacidad en todos los sitios para mantener la videoconferencia con solvencia por culpa de los medios y las conexiones", manifiesta. "Internet no llega igual a todas partes y no es factible llevar a cabo una vista sin los medios oportunos", sentencia.

De momento, al margen de las medidas de seguridad laboral, el Ministerio trabaja en el diseño de un plan de choque para reforzar los juzgados mercantiles, de lo social y de lo contencioso-administrativo ante el alud de casos relacionados con la crisis que se prevén.

Se quiere poner en marcha para finales de año una veintena de juzgados que atiendan de forma temporal estos asuntos y que continúen su actividad en 2021. También se habla de habilitar el próximo mes de agosto, una medida que para el decano oscense no es más que "cosmética" porque "se intenta corregir con una norma problemas de la justicia que no son de ahora sino que ya estaban ahí, el colapso de la justicia viene de lejos".

Así, ve que va a ser complicada y lenta la vuelta a una normalidad que "ya no es deseable" porque, aunque en Huesca "creo que no estamos del todo mal -dice-, seguimos viendo plazos que no son de recibo, como sentencias que tardan tres años en dictarse". Asevera que tan solo en citas penales se han suspendido unas cien, que habrá que retomarlas y sumarles los casos nuevos. Lamenta que "lo que hemos dejado de hacer no tendremos otro tiempo para hacerlo".

Al hilo de lo cual, García Bernués considera que es "escandaloso que la Administración de Justicia haya estado completamente paralizada mientras que ha habido otras actividades que se han mantenido" y dice que "es algo que tenemos que pensar muy bien, por qué la justicia no ha funcionado".

Del mismo modo, incide en que "es más, la justicia tiene un funcionamiento muy deficiente desde hace mucho, esto ya es algo crónico". Puntualiza que "es entendible que se paralizase por el desconcierto inicial, pero no que solo hayan funcionado lo esencial, que no es tanto".

Para lo cual recuerda que los abogados, particularmente los de oficio, han estado al pie del cañón todos los días y todas las horas ya que prestan servicios de asistencia al detenido o de asistencia a las víctimas de violencia de género.

En cuanto a situaciones familiares más comunes que se han visto afectadas por el coronavirus, señala el decano que en el Alto Aragón no ha habido un aumento en el número de consultas ni en divorcios ni en violencia de género, como ha ocurrido en otras provincias, aunque al principio del estado de alarma, recuerda, que dieron mucho que hablar las custodias compartidas y los regímenes de visitas y alimenticios. Por lo cual desde el Colegio se difundieron los criterios, no vinculantes, de jueces de Huesca y Zaragoza "que sumado a la sensatez no fue a más".

Sobre este asunto, indica que "el real decreto 16/2020 plantea compensaciones y establece un sistema más ágil para permitir adaptar las obligaciones derivadas del divorcio a la situación creada por la covid-19".