El cohete de las emociones se lanza desde un balcón del Pasaje Almériz

HUESCA.- Vivir el sentimiento laurentino de manera responsable es posible, si se tiene muy claro que lo primero es la salud, la propia y la del resto de la población, y después va todo lo demás.

Así lo entiende el colectivo ciudadano Pasaje Almériz al Poder, que a las 12:00 ha lanzado el chupinazo desde uno de los balcones de esta zona de la ciudad de Huesca, para regocijo de los vecinos que aguardaban en los jardines, con sus pertienentes mascarillas y distancia sanitaria.

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Con un marcado carácter familiar, antes, en las casas, se han celebrado los tradicionales almuerzos, que han reunido a padres, madres, hijos e hijas, y en algunos casos también a los abuelos.

El menú, el imaginable: huevos fritos, patatas, longaniza, chorizo, pan con y sin tomate, bacon, morcilla, salchichas, fruta, tartas, cualquier cosa imaginable más y melocotón con vino.

En torno a las diez ha comenzado también a sonar la música desde el balcón de Roberto, que ha hecho de dj para agrado de los vecinos, una misión que cumple en el barrio a la perfección y que se reparte con Arturo.

Canciones de distintas épocas y estilos han animado el tiempo transcurrido entre los almuerzos y el chupinazo, hasta que Chema Usieto ha prendido la mecha para que estallara el cohete a las 12:00.

Pasaje Almériz al Poder ya celebró este sábado un primer acto, consistente en la imposición de bandas y entrega de macetas de albahaca a las mairalesas Enriqueta, Josefina y Gloria.

Con un sencillo programa de actos, se seguirá viviendo San Lorenzo desde los balcones, hasta que el día 15 se despida esta singular celebración con la que solo se quiere dar expresión a un sentimiento.