Huesca

SAN LORENZO 2020

La hostelería factura un 75 por ciento menos en las "no fiestas"

El presidente del sector, Carmelo Bosque, advierte que vienen meses muy duros

La hostelería factura un 75 por ciento menos en las "no fiestas"
La hostelería factura un 75 por ciento menos en las "no fiestas"
R.N.

HUESCA.- La crisis sanitaria ha limitado cuantiosamente el movimiento de las cajas registradoras en los bares y restaurantes de la ciudad de Huesca, que han facturado durante los días 9, 10 y 11 de agosto un 75 % menos que en el arranque de las fiestas de San Lorenzo del año pasado. La hostelería oscense está viviendo su particular agosto negro en este 2020 debido a la cancelación de las fiestas laurentinas, en las que habitualmente el sector acumula en torno a un 40 % de sus beneficios anuales.

Carmelo Bosque, presidente de la Asociación Provincial de Hostelería y Turismo de Huesca, aporta estos datos y asegura que los profesionales del sector quedarán "contentos" si logran recaudar el 25 % de la facturación de ejercicios pasados.

Estas caídas de ingresos, plantea, pueden suponer que algunos establecimientos se vean obligados a echar el cierre. "Espero que nadie se quede por el camino porque los meses de octubre, noviembre y diciembre van a ser muy duros", advierte el presidente, que destaca la necesidad de alargar los ERTE hasta diciembre.

La previsión de la inevitable caída de ingresos ha hecho que este San Lorenzo nadie haya contratado a extras, cuando habitualmente hay en la ciudad unos 300, entre todos los locales. Estas "fiestas sin fiestas" son como un fin de semana, "igual que cualquier sábado con afluencia de gente, que eso sí, van vestidos de blanco y verde. Los rebrotes han matado muchísimo a nuestro sector", lamenta.

El 9 de agosto, detalla, se sirvieron en torno a un 25 % de los tradicionales almuerzos que se consumen habitualmente, el día 10 los oscenses también salieron a comer y se reunieron con los amigos, y a partir de allí "prácticamente el San Lorenzo se ha quedado en nada", apunta.

Además, pone en valor el comportamiento ejemplar de los oscenses durante estos inusuales festejos en los que el sector está cumpliendo la normativa sanitaria de forma rigurosa.

El presidente de los hosteleros recalca el estricto respeto de las medidas de prevención en los establecimientos de hostelería, en los que se cumple el uso de la mascarilla, la higiene de manos y los límites de aforos, que marcan un 50 % para el interior de los locales y un 75 % en las terrazas, donde no están permitidas las agrupaciones de más de 10 personas. Con todas estas pautas, dice, "un establecimiento de hostelería es un lugar mucho más seguro que una finca o un huerto", espacios alternativos para muchas reuniones de amigos y familiares ante los límites impuestos a los hosteleros.

También dirige unas palabras al ocio nocturno, "que son los que peor lo están pasando porque no tienen ningún tipo de actividad desde hace ya casi seis meses. Este sector, junto a la cultura, son dos elementos importantes en la vida social y lo están pasando muy mal porque no tienen ninguna opción".

Carmelo Bosque plantea que la ciudad de Huesca está esperando el regreso a la "nueva normalidad", "porque realmente, no lo entendemos, no tenemos en Huesca capital tantos casos como para estar en fase 2".

En esta línea, hace alusión a las declaraciones realizadas este miércoles por el presidente de Aragón, Javier Lambán, que planteó que la DGA baraja a corto plazo devolver a la nueva normalidad a algunas de las zonas de Aragón que se encuentran en fase 2.

"Estamos esperando que nos dejen en la situación en la que tenemos que estar para que los bares que no han podido abrir trabajen. Son autónomos que con eso se ganan la vida. A ver si somos capaces de entender que la hostelería no es la culpable de todo, y ahora, si vienen rebrotes en 15 días, de quién será la culpa de la hostelería que ha dado almuerzos o de la gente que se ha ido a su finca o a su huerto a celebrar la fiesta", concluye.