Huesca

CRISIS DEL CORONAVIRUS

La educación infantil privada solicita un plan de contingencia

Desde la patronal se pide al Ejecutivo respaldo económico para sobrevivir

La educación infantil privada solicita un plan de contingencia
La educación infantil privada solicita un plan de contingencia
P.S.

HUESCA.- La Patronal de Centros de Educación Infantil Privados (Pacei) en Aragón solicitó este martes al Departamento de Educación del Gobierno autonómico un plan de contingencia para la supervivencia se estos centros que en la comunidad dan plaza -según la patronal- a 8.000 niñas y niños de entre 0 a 3 años.

Un plan de contingencia que se resumen en que, "si ocurre algo en un centro y lo cierran o clausuran un aula, queremos tener un respaldo de Educación. Somos parte de la red de centros educativos de la Consejería de Educación. Algo de apoyo deberíamos tener pero nadie nos dice nada", lamenta Patricia Betrián, vicepresidenta de la Pacei y propietaria del Centro de Educación Infantil Club Minnie.

Desde la patronal sostienen que además de arbitrar medidas para asegurar la salud frente a la pandemia es responsabilidad del Ejecutivo asegurar "la sostenibilidad económica de los centros que son de su competencia", añadieron en comunicado.

Ante la incertidumbre sobre el nuevo curso, han planteado al Departamento de Educación varias preguntas. Entre ellas una sobre la forma de articular los grupos "burbuja" o grupos estables de convivencia. Quieren saber si hay posibilidad de mezclar grupos de edades, pues según Betrián "es muy complicado cumplir a rajatabla si se quiere seguir ofertando a las familias horarios que satisfagan sus demandas" y que conlleva la ampliación de personal. En su caso, ha ampliado en una trabajadora la plantilla.

En el caso del centro de educación infantil Zimbel ha ampliado hasta la jornada completa a aquellas educadoras que trabajaban seis horas. y el centro cerrará a las 16 horas cuando habitualmente está abierto hasta las 18 horas. "No puedo dar más servicio con las trabajadoras que tengo y por la tarde no hay número de niños suficientes para hacer grupos burbuja por edad". Además, "este año no me cojo grupo y estaré de reserva por si alguna trabajadora no puede venir porque se pone con fiebre".

Todo eso incrementa el coste de mantener el centro abierto "y si finalmente hubiera padres que se echaran atrás -por ahora tiene todas las plazas autorizadas reservadas (53)- al hacer el ERTE adquirimos el compromiso de mantener los trabajos seis meses", con lo que tampoco podría aligerar el coste en ese apartado.

LA CONFIANZA DE LAS FAMILIAS

Respecto a la confianza que las familias deben tener en estos centros, Pacei les ha transmitido la seguridad de que se están implementando todas las medidas de control sanitario recomendadas por la autoridad sanitaria competente, y se ha desarrollado un protocolo sanitario para hacer de los centros zonas libres de covid.

Ese diseño se guió por lo que les dictó la experiencia al frente de estos centros "y con las medidas que el mercado ha ideado para esta situación; las hemos sumado todas: sprays, líquidos desinfectante, alfombrilla o máquina desinfectante para la limpieza diaria del centro. Un apuesta a punto que de media para cada centro, según Pacei, ha sido de unos 2.000 euros.

Además, hay un protocolo de actuación con los niños, que empieza a la entrada. "Se les coge aúpa, se les quitan los zapatos" y se les pone el parque se ha pedido a las familias que dejen en las escuelas. Una persona se encarga de llevarlos a cada aula porque las educadoras no salen", explica Betrian. Cada aula sale escalonadamente.

Cuando regresan al aula se desinfecta todo (en el patio) y a los 15 minutos sale otra clase. "Está programado para que ningún grupo se junte", lo que se hace con "dos objetivos, para que el contagio no sea masivo y para que en el caso de que haya un positivo y venga Sanidad se le pueda mostrar el histórico de los alumnos que hay en el aula", explica.

Trasmitir tranquilidad es importante especialmente cuando, como explica Navasa, las familias, especialmente aquellas con niños más pequeños "no se deciden a traerlos. Algunos van a dilartar el ingreso hasta octubre, otros hasta enero. Incluso hasta marzo, cuando ya tengan un año y un año y medio. Tienen miedo y quiere esperar a ver qué pasa".

Pese a la incertidumbre, las responsables de estos dos centros educativos están contentas con como se ha venido desarrollando la actividad durante estos dos meses y medio que llevan abiertos.

Navasa incluso apunta una cosa positiva de todo el trasiego que implica la recepción de los niños, el lavado frecuente de manos y el quitar y poner los zapatos, lo que en un principio no resultó del agrado de todos. "Al principio los niños sí eran reacios a que les quitaran los zapatos porque están en un momento de mucha posesión de lo suyo. Pero al final han adquirido la rutina", explica Navasa, manteniendo el optimismo, "porque hemos aprovechado para trabajar otras cosas -a nivel pedagógico- que en otros momentos de normalidad no teníamos tanto tiempo. Por ejemplo, los más mayores ya se saben quitar y poner los zapatos ellos solos. Irán al cole con esa autonomía adquirida", añade.

MÁS PREGUNTAS

Entre el conjunto de preguntas que la patronal de centros de Educación Infantil ha trasladado al Departamento de Educación también está el si van a poder realizar los servicios de recogida y comedor de alumnos de otros centros o sobre el respaldo que ofrece el Departamento de Educación si se decreta el cierre parcial o total de un centro.

A este respecto, Betrián trasladó que lo que quieren saber es "qué pasa en un centro si detecta un caso positivo, si se cerraría el aula o el centro". "Empatizamos con la complejidad de la situación para todos", pero "si se activan un protocolo covid que sea igual para todos" añadió en referencia al cierre de un centro en Teruel y de una aula en Zaragoza. Quieren "saber exactamente si la actuación va a ser para todos los centros la misma".

La patronal hizo hincapié en que desde el 22 de junio, fecha de reapertura de los centros privados, "son los únicos que en Aragón ayudan a la conciliación familiar y laboral de los padres".

"Necesitamos muchas respuestas y, sobre todo, dejar claro que nos den el mismo trato que a las escuelas públicas de 0 a 3 años; estamos abiertos desde el 22 de junio aplicando un protocolo estricto para evitar contagios, pero también tenemos que sobrevivir", agregó Betrián.