Cinco monjas de la residencia de las Misioneras del Pilar de Huesca dan positivo en coronavirus

HUESCA.- Cinco religiosas de la residencia universitaria de las Misioneras de Nuestra Señora del Pilar de Huesca han dado positivo en coronavirus. Según ha informado la subdirectora del centro, Mercedes Ceballos, cuatro de ellas se encuentran aisladas, en unas dependencias separadas de las que utilizan las estudiantes mientras que otra está ingresada en San Jorge desde el lunes.

Esta última, ha relatado Ceballos, dio negativo cuando se detectó el brote, a principios de mes, antes de la llegada de las estudiantes, que comenzaron a ocupar las habitaciones desde el día 11. La religiosa fue trasladada al hospital San Jorge de Huesca por otra dolencia distinta. Una vez allí, al realizársele el test de nuevo, el resultado fue positivo. Las cuatro restantes, señaló Ceballos, "están guardando cuarentena y evolucionando positivamente".

Como ha incidido Ceballos, las familias fueron informadas "una a una" de la situación y e insistió en que las monjas afectadas se encuentran separadas de las residentes y que no tienen contacto alguno con las estudiantes. De hecho, ya se encontraban en cuarentena antes de la llegada de las jóvenes. También dieron parte a Salud Pública con el fin de poner en marcha todos los protocolos de seguridad y prevención necesarios contra la covid-19.

La subdirectora del centro ha señalado además que las jóvenes están mostrando "una actitud responsable" ante esta situación y un interés constante por la salud de las religiosas.

MEDIDAS DE PROTECCIÓN

Ahora, con la llegada de las jóvenes, ha explicado Ceballos, "hemos llevado a cabo todas las medidas de seguridad, desinfectando los equipajes, tomándoles la temperatura... los padres no han subido para nadad a las habitaciones, solo las chicas por las escaleras, el ascensor lo utilizamos solo una de nosotras para subir las maletas, que dejamos en la puerta y las chicas las entran a su habitación", afirmó. Previamente, una empresa especializada se había ocupado de desinfectar todas las instalaciones. En la residencia, tras reducirse el aforo por las nuevas normas de seguridad, se hospedan ahora 55 jóvenes y hay incluso lista de espera.

En el comedor también se guardan medidas de seguridad especiales y se come por turnos y solo dos trabajadoras se encargan de servir la comida, para lo que hay que hacer cola bandeja en mano y guardando las distancias de seguridad. Ya no se sirve así de mesa en mesa, donde también ha aumentado la separación entre las comensales