Huesca

CRISIS DEL CORONAVIRUS

Ana Pardo-Saganta, investigadora: "Hacer una ciencia de excelencia como en Boston, aquí es casi imposible"

La jaquesa logra uno de los premios investigadores AstraZeneca

Ana Pardo-Saganta, investigadora: "Hacer una ciencia de excelencia como en Boston, aquí es casi imposible"
Ana Pardo-Saganta, investigadora: "Hacer una ciencia de excelencia como en Boston, aquí es casi imposible"
S.E.

HUESCA.- La jaquesa Ana Pardo-Saganta, investigadora principal en el Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA) de Navarra, ha conseguido uno de los V Premios Jóvenes Investigadores AstraZeneca, que pretende reconocer y fomentar la innovación científica con españoles menores de 40 años, y que consiste en una beca de 20.000 euros para sus proyectos, en el caso de la altoaragonesa relacionado con la regeneración pulmonar y enfermedades respiratorias. Recogerá el galardón el 10 de febrero. Un reconocimiento con metálico y también con visibilidad habida cuenta además la reputación de la multinacional farmacéutica.

Nacida en Jaca en 1981, cursó Secundaria en el IES Domingo Miral y después Biología en la Universidad de Navarra. Cuando terminó la carrera, inició la tesis doctoral en el CIMA con una beca. "Esto sí que ha mejorado, porque ahora se hace contrato a los estudiantes de doctorado". La centró en la Hepatología, con especialización en fibrosis hepática y cáncer de hígado. El centro de investigación biomédica pamplonés tiene 350 profesionales entre técnicos, estudiantes de doctorado, estudiantes postdoctorales e investigadores principales. Es uno de los complejos científicos más reconocidos en la UE, con algunos departamentos (inmunología e inmunoterapia o hepatología) más prestigiosos del país. La clave de su éxito es la confluencia de la Universidad de Navarra, la Clínica Universitaria y el CIMA, triángulo virtuoso de conocimiento y sus aplicaciones.

Pardo-Saganta dio un giro en su especialización cuando aprovechó la estancia postdoctoral en Boston, líder mundial en investigación biomédica con la Universidad de Harvard y el Massachussetts General Hospital. Conoció a su mentor, uno de los popes en regeneración pulmonar. Y aprovechó el nexo entre su experiencia, "la regeneración hepática", y su vocación, "la regeneración pulmonar". El campo de acción es tan hercúleo que, asegura, más de 600 millones de personas están afectadas por enfermedades pulmonares. Y la evolución investigadora es tan vertiginosa que, cuando ella empezó esta línea, ni se habían identificado las células-madre que han incorporado grandes opciones para la regeneración pulmonar.

Expone que la investigación avanza en la búsqueda de tratamientos eficaces para patologíascomo la fibrosis pulmonar idiopática o el cáncer de pulmón, para las que es preciso, una vez bloqueado el progreso, una regeneración del tejido pulmonar. Parten de la investigación básica con animales para identificar los mapas moleculares y celulares implicados en las enfermedades, y luego hay una investigación traslacional para la aplicación en ensayos clínicos con seres humanos en sus diferentes fases.

LA PREGUNTA BIOLÓGICA

El grupo que dirige se configuró hace cuatro años, cuando ella retornó de Boston. Son cuatro: dos estudiantes de doctorado, una investigadora posdoctoral y la principal. "Por supuesto, hace falta mucho más personal. Uno de los dramas del sistema de Ciencia en España es que es muy complicada la contratación. Ya, de la estabilidad, ni hablamos".

No trabajan "aún" cáncer de pulmón, pero sí tienen "ideas en mente que pueden ser muy prometedoras si conseguimos financiación. No tenemos recursos ni económicos ni de personas. No nos da para más. Pero tenemos una idea de lo que nos gustaría hacer. En el cáncer son otros mecanismos, aunque al final está todo interrelacionado. Hay un componente inflamatorio y un componente de estroma tumoral que conocemos muy bien. Y lo más importante de este cáncer, de los peores en la actualidad, es la detección precoz. En cualquier enfermedad respiratoria como la fibrosis pulmonar idiopática, se diagnostica tan tarde que, cuando se hace, la media de supervivencia es de entre tres y cinco años. Y, como no hay tratamiento eficaz curativo, sucede lo mismo que en el cáncer de pulmón. Se está trabajando en la detección precoz y podemos proponer alguna herramienta que conocemos del estudio de otras enfermedades respiratorias".

La esperanza es que hay muchos grupos en España con estudios que identifican mecanismos y desarrollan nuevos conocimientos, pero "por el diagnóstico tan tardío cuesta encontrar una estrategia terapéutica que cure el cáncer de pulmón".

Explica la interconexión entre las investigaciones sobre patologías diversas. "Se ha visto mucho en covid-19, donde, al no tener nada para curar, se han usado medicamentos que eran para otras patologías. Hay mecanismos compartidos en patologías y distintos órganos. Nosotros estudiamos la fibrosis pulmonar y en mi tesis estudié la hepática, y hay mecanismos compartidos, otros no. Por eso avanzamos en el estudio de muchas patologías. Hay que tener la mente muy abierta y el máximo conocimiento posible. Hay que tener el foco muy centrado en tu pregunta biológica y luego abstraerte y ver el todo. Cuál es el ambiente en el que se desarrolla esa patología y mirar a procesos patológicos similares en otros tejidos, porque pueden ser compartidos".

Respecto a la pregunta biológica, explica que cada una de las personas del grupo está centrada en un proyecto, "aunque luego interactuamos mucho", y cada uno de ellos tiene una "pregunta con una hipótesis que tiene que intentar contestar". Los investigadores también están sometidos a la presión temporal. "Tenemos unos plazos basados en contratos o financiaciones. Cuando te financian un proyecto, tienes evaluaciones y una justificación final. A veces, no se encuentra lo que uno busca, o sí, y se necesitan unos años para contestar a las obligaciones. La investigación es muy flexible, porque empiezas y vas encontrando cosas, y conforme vas viendo los resultados la rediriges. A veces, en el tiempo planteado no has podido. Nosotros trabajamos con modelos in vivo con ratones y a veces la colonia da problemas, o tienes que repetir experimentos... Es el método científico para asegurar que las conclusiones son las adecuadas. La mayoría de veces se necesita más tiempo que el que marcan los financiadores".

El grupo tuvo la misma infección que Carlos López-Otín en su bioterio y hubieron de sacrificar a todos los animales. "Es terrible, y más en nuestro caso que somos jóvenes investigadores, no tienes tantos recursos y necesitas los resultados para publicar tus artículos para que te evalúen y puedas volver a solicitar proyectos al Ministerio u otras instancias. Todo depende de lo que has producido antes. Es fatal".

La investigación se juega todo al concepto de excelencia y se enfrenta a la falta de seguridad. "Para conseguir financiación, optamos a todo lo público, al Ministerio o el Instituto Carlos III o privadas como Fundación AstraZeneca. Sí tenemos financiación mixta. En algunos centros, te otorga un presupuesto cada 5 años, pero no es lo común en España. ¿Qué seguridad tenemos? Cero. La investigación es muy cara y las cuantías son ridículas completamente. Hacer una ciencia de excelencia o calidad como la que aprendí en Boston aquí es imposible o al menos muy difícil. Los recursos, salvo que consigas una financiación mucho más grande (en Europa hay algunos casos), son muy difíciles de conseguir y la seguridad y la estabilidad es nula" .