Huesca

CORONAVIRUS

Presidentes de las comunidades “en contra de su voluntad” por la covid-19

Las juntas de vecinos se retrasan por la pandemia, lo que provoca prolongar los mandatos

Una de las salas de la Parroquia San José acogió una reunión manteniendo las medidas sanitarias.
Una de las salas de la Parroquia San José acogió una reunión manteniendo las medidas sanitarias.
R.G.

“Es muy difícil celebrar reuniones de comunidades de vecinos con estas restricciones”, afirma José Luis González, delegado provincial del Colegio de Administradores de Fincas en Aragón, ya que las condiciones establecidas desde el Gobierno autonómico para ello, obligan a cumplir con un 30 % del aforo del espacio donde se celebren, además, también hay que tener en cuenta todas las medidas sanitarias establecidas, como es la distancia social entre personas.

Esta situación ha generado que muchos vecinos tengan que renovar su cargo como presidente “en contra de su voluntad”, ya que habitualmente “solo ocupan el cargo durante un año”. Este es considerado “uno de los mayores problemas” por el delegado provincial.

En este sentido, González explica que es el propio presidente quien quiere convocar las reuniones para que otro vecino ocupe el cargo, pero tras conocer las restricciones actuales, González explica que los presidentes “se echan para atrás”, pues en el caso de que suceda algo, “es su responsabilidad llevarlas a cabo incumpliendo la normativa”. Y es que, desde el Colegio insisten en que “hoy por hoy no hay salas que permitan hacer reuniones cumpliendo con todas las restricciones”, puesto que para comunidades de más de 30 ó 40 vecinos, “no hay salas donde realizarlas, es imposible”.

"Hoy por hoy no hay salas que permitan hacer reuniones cumpliendo con todas las restricciones"

Otro de los problemas a tener en cuenta con esta “paralización” de las reuniones, es que se están retrasando las obras pendientes en las comunidades, lo que lleva a que, según explica González, “se retrase la economía”, porque si no se hacen reuniones no pueden llevar a cabo una actividad normal, “solo se realizan los pagos habituales, pero no los extraordinarios, ya que necesitan un acuerdo de asamblea, y si no existe ese acuerdo, no pueden hacerse”, lamenta el delegado, quien defiende que “los administradores de fincas a nivel nacional mueven mucho dinero en obras”, como son las que afectan a la accesibilidad, la eficiencia energética o la rehabilitación de los edificios en general.

A todo ello, se le añaden otros factores como es el miedo de las personas mayores a acudir a lugares cerrados y con personas que no son convivientes, y González recuerda que “la mayoría de las personas que acuden a estas reuniones, son mayores”.

Por todo esto, los Administradores de Fincas colegiados han celebrado diversas reuniones con los distintos grupos parlamentarios para solicitar en el Congreso de los Diputados una norma que reconociera la validez de las juntas telemáticas, para garantizar de esta forma el derecho de participación de todos los propietarios.

Desde el Colegio lamentan que “las nuevas tecnologías permiten las reuniones virtuales, sin embargo, la Ley de Propiedad Horizontal solo reconoce la validez a las reuniones presenciales, salvo la ley catalana, que sí establece la posibilidad de este tipo de reuniones”, por lo que desde el Colegio, proponen que se iguale este hecho en todas las comunidades del país, ya que en Cataluña estas reuniones “no han generado ningún problema entre los propietarios”, y garantizan que “han resultado útiles para que no se frene ni la vida en comunidad ni la economía durante esta crisis”.