Huesca

VOLUNTARIADO

Amalia Foncillas: “He hecho grandes amistades en la Casa de Andalucía”

Es socia y voluntaria desde la fundación de la casa regional en Huesca

Amalia Foncillas, voluntaria de la Casa de Andalucía desde su fundación.
Amalia Foncillas, voluntaria de la Casa de Andalucía desde su fundación.
S.E.

¿Qué te llevó a ser voluntaria?

—Siempre me ha gustado trabajar en movimientos cívicos y colectivos. Desde muy joven he participado activamente en grupos de Acción Católica, catequesis, Manos Unidas... También en las asociaciones de padres y madres de los colegios de mis hijos y en la junta de la Asociación de Vecinos del barrio donde vivo. Hace 30 años, cuando se creó la Casa de Andalucía, fui una de las primeras socias, junto con mi marido, porque soy una apasionada de todo lo referente a Andalucía.

¿Cómo está afectando la pandemia al voluntariado?

—Muy negativamente, como en todas las asociaciones. Al no poder reunirnos ni celebrar actos, como actuaciones de baile, conferencias, comidas de socios, vermús flamencos..., todo eso ha producido un distanciamiento que nos ha afectado mucho. Ha sido como perder parte de nuestra idiosincrasia.

¿Por qué motivo escogiste esta entidad?

—Porque casi toda la familia de mi marido ha vivido y sigue viviendo en Andalucía. Cuando mis hijos eran pequeños, siempre hemos pasado las vacaciones en las playas de la provincia de Cádiz. Otro motivo muy especial es mi cuñada Lola, sevillana, fundadora de la Casa, segunda presidenta y muy querida por todos. Y el tercer motivo, porque yo siempre me he sentido mitad aragonesa y mitad andaluza.

¿Qué te reporta esta labor?

—Conocer a la gente de Andalucía, sus costumbres, cultura, folklore... y, sobre todo, las grandes amistades que he hecho en la Casa de Andalucía.

¿Por qué animarías a otras personas a hacerse voluntarias?

—Porque es muy enriquecedor fomentar la amistad y conocer la cultura andaluza. También porque es la única forma de que la Casa de Andalucía siga funcionando como siempre lo ha hecho.