Huesca

VOLUNTARIADO

Inmaculada Muriel Fragoso: “Te ganan el corazón y los echas de menos cuando terminan las actividades”

Lleva un año y medio ayudando a escolares en Cruz Blanca de Huesca

Inmaculada Muriel en una de las actividades de Cruz Blanca
Inmaculada Muriel en una de las actividades de Cruz Blanca
S.E.

¿Qué le llevó a ser voluntario?

—Vi en la web que buscaban gente para echar una mano, me presenté en la sede de Huesca, tuve una charla y salí del centro convertida en una voluntaria más. Siempre había tenido ganas de ayudar a las demás personas.

¿Cómo está afectando la pandemia al voluntariado?

—Para los voluntarios es un grave inconveniente porque limita mucho tu actuación y para las actividades supone grandes perjuicios, ya que te obligan a restringir las acciones y la participación de la gente.

¿Por qué motivo escogió esta entidad?

—Colaboré un par de años en la campaña de recogida de juguetes para Navidad y ese contacto me sirvió para conocer a la gente que forma parte de Cruz Blanca. Su carácter y amabilidad me predispuso a seguir colaborando en cuanto se me presentó la oportunidad.

¿Qué le reporta esta labor?

—La satisfacción tan grande que supone ver la cara de los niños y el cariño que te transmiten en el quehacer diario de las actividades. Te ganan el corazón y los echas de menos cuando se terminan las actividades y te vas a casa. Su respuesta es un acicate para emplearte con más ganas si cabe en la actividad para que ellos se sientan mejor.

¿Por qué animaría a otras personas a hacerse voluntarios?

—Ayudar a los demás supone recibir más de lo que entregas y eso es una vitamina que necesitas cada día para hacer frente a la vida. Ser voluntario te llena, te da una sentido más pleno de la vida y te reconcilia con el ser humano. Yo personalmente animo a todo aquel que pueda a que dedique una parte de su tiempo a los demás.

¿Cuál es la gran lección que le han dado los niños con los que trabaja?

—El cariño que recibes, el brillo de sus ojos, su sonrisa, todo eso te acerca a ellos y te traslada la emoción de que puedes hacer las cosas ganándote su aprobación e interés.