Huesca

LA ENTREVISTA

Alejandro Escuer: “El año que se retome será más emocionante de lo que habitualmente es”

El director de la Banda de Música de Huesca espera que el próximo verano haya fiestas laurentinas y se puedan volver a sentir las danzas

Alejandro Escuer.
Alejandro Escuer.
S.E.

Tres notas que llegan al alma. Es lo que necesitan los oscenses para recordar el sentimiento blanco y verde. Con las Estampas Laurentinas del maestro Sampériz y el Himno de Osca, de Daniel Montorio, la Banda de Música de Huesca acercó un trozo de San Lorenzo a quienes estuvieron en el parque Miguel Servet este miércoles, 4 de agosto.

Un concierto que les sirvió para quitarse un poco la espina clavada por acumular un segundo año más sin fiestas. Entre las piezas que se pudieron escuchar hubo pasodobles, música latina, de cine e incluso algunas originales escritas para la banda.

Un repertorio muy completo que incluyó también melodías que todo oscense lleva en el corazón, como es el caso del tema de las Espadas. “Volver a tocarla ‘de propio’ hizo que a todos se nos pusiera la piel de gallina”, expresa el director de la Banda de Música de Huesca, Alejandro Escuer.

Hasta el parque se acercaron muchas personas, tanto las que habían sacado su entrada como las que disfrutaron del espectáculo en los alrededores. Con un total de 200 disponibles para reservar de forma gratuita en el Centro Cultural Manuel Benito Moliner, el resto se concentraron en las zonas cercanas al Quiosco de la Música.

Para él, ver a tanta gente le anima a seguir, ya que la vuelta ha sido dura. “Cuando hemos estado parados, yo pensaba que, como tardemos mucho más, no sé si la banda saldrá adelante porque la gente ya se acostumbra. Y todo lo contrario, la gente tenía muchas ganas”, confiesa.

De hecho, regresaron a los ensayos la última semana de junio, lo que también se ha visto reflejado en la programación de temas, puesto que el tiempo para ensayar no le ha permitido crear una totalmente innovadora. Eso llegará en futuras citas ya que están en marcha otra vez. “Dentro de poco actuamos en Bolea y tenemos proyectos hasta final de este año”, comenta Escuer.

Con el futuro incierto, al pensar en el San Lorenzo de 2022 no se imagina que haya una normalidad como antes. Considera que los aforos aún no serán los mismos pero que sí se podrá celebrar algo.

Para Escuer, el 10 de agosto es la fecha en la que siente el reconocimiento a la banda, pero no cree en el año que viene la Plaza de San Lorenzo vaya a estar tan abarrotada como acostumbra.

En cuanto al repertorio, las danzas son invariables, donde sí que pueden modificar es en sus propios conciertos. Aunque puede resultar repetitivo tocar siempre lo mismo, tiene un sentimiento único.

Y cuando se retomen las fiestas, esa emotividad será mayor. “Al tocar la danza de las Espadas te recorre algo por el cuerpo. Lo notas en todos. Esas primeras notas son fantásticas, y el año que se retome, será mucho más emocionante de lo que es habitualmente cada año”, explica con ilusión el director.