Huesca

SAN LORENZO 2021

Al sol de San Lorenzo, las terrazas de Huesca señalan el ocio más seguro

En los Porches, la plaza López Allué, de los Fueros, San Antonio..., bares y restaurantes sacan el servicio a la calle

Carmelo Bosque atiende una mesa de clientes.
Carmelo Bosque atiende una mesa de clientes.
Pablo Segura

San Lorenzo siempre se ha vivido en la calle. En las plazas, en las Peñas, en los bares, la ciudad se llena de vida y sus gentes salen al encuentro de cada lugar común de la fiesta. Por segundo año consecutivo, no será posible, pero no por ello Huesca se dejará de vestir de verde y blanco, y no por ello la ciudad eludirá la transformación que acontece cada agosto.

Las terrazas, que tan amistosas se han vuelto en el último año y medio, se convierten ahora en el eje central de esta semana. Allá donde miren, los Porches de Galicia, la plaza López Allué, el Coso, la plaza San Antonio, la plaza de los Fueros o la calle Padre Huesca. Han sido, son y serán lugares especiales de San Lorenzo y aún más este 2021. Bares y restaurantes reforzarán sus terrazas para proporcionar el ocio más seguro frente a la situación sanitaria actual.

¿Quién no ha visto caer la tarde laurentina sentado en los Porches? El hostal Rugaca concede este privilegio. Para esta semana tienen casi todo el alojamiento al completo, están convencidos de que será menos sin fiestas, pero contentos de que la gente acuda a la terraza. “En estos momentos es la vida, lo que no nos permiten dentro, se puede hacer fuera”, valora Jesús, parte del personal del hostal, que subraya que las mesas están funcionando muy bien. “No hay fiestas pero no podemos estar tristes, además vemos que hay mucho movimiento”, advierte.

Si no hay sitio, la plaza Luis López Allué está solo unos pasos más arriba y el Coso, donde se encuentra el Bar Brasil, es siempre una buena opción. Alegría, su dueña, con tantos problemas de aforo, ha decidido no abrir las reservas: “El primero que llegue y se siente, almorzará, comerá o cenará”, apunta, porque ya tienen la experiencia del año pasado. “Lo que pierdes ya lo ganarás en salud, en dinero y en todo”, avisa.

La plaza San Antonio y la plaza Fueros de Aragón son dos puntos de reunión imperdibles esta semana. La Cantina abre tras no poder hacerlo el año pasado. La ilusión y el ánimo está algo decaído, lamenta Carlos, el propietario, ya que el año pasado consiguieron únicamente un 30 % de facturación, pero confían mucho en los vecinos de Huesca, que “siempre han respondido”, resalta. “La imagen de la plaza San Antonio con todos sentados es la que buscamos”, suspira el hostelero.

La calle Padre Huesca se ponía año tras año a rebosar, esta semana estará más tranquila. La Giara, restaurante italiano que reparte comida a domicilio comparte esquina con ella y lo vivirá como un día normal. La terraza les va a ayudar mucho, asegura su camarero Giovanni, y esperan poder tener trabajo continuo, a pesar de la situación. De igual manera en El Origen. Bea, que está a cargo desde hace años, prepara el pollo al chilindrón y el melocotón con vino típico de San Lorenzo. Este año tendrá que ser a domicilio pero con el mejor sabor.

En esta situación se encuentran los hosteleros, animados a pesar de las restricciones. El representante de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería, Carmelo Bosque, lo asume pero no lo comparte. “Ayer estábamos cerrando y un grupo de mujeres se preguntaba a qué casa iban a ir para seguir tomando algo. El toque de queda nos afecta directamente y es más fácil dictar normas que explicarlo con pedagogía”, lamenta.

Si a alguien agradece estos meses de confinamiento es a los sanitarios y a los clientes, que “han estado al pie del cañón”, subraya, y la hostelería va a seguir estando allí. “Sabemos que no hay fiestas, pero la gente se va a sentar a tomar una cerveza, una tapa o una copa, a dialogar y a verse, porque la gente tiene muchas ganas de vivir y más vale no cortarlo e identificarse con ello”, concluye.