Huesca

PRESENCIALIDAD

El teletrabajo pierde peso en las empresas altoaragonesas

El modelo mixto todavía se mantiene en casos de conciliación familiar

La presencialidad se va recuperando, caso del Ayuntamiento, pero manteniendo las medidas covid.
La presencialidad se va recuperando, caso del Ayuntamiento, pero manteniendo las medidas covid.
Pablo Segura

Regresando a la nueva normalidad, las costumbres adquiridas durante la pandemia parece que comienzan a diluirse. El teletrabajo al que tuvieron que adaptarse muchos trabajadores y que predominó en los momentos de alta incidencia de covid, empieza a reducirse tras la vuelta de vacaciones. Algunos sectores como la administración y la banca, debido a sus características, aún no recuperan el 100 % de presencialidad y siguen apostando por un modelo mixto instaurado en muchos países europeos con éxito para compatibilizarlo con la vida familiar.

Lo confirman desde la secretaria general de Ceos-Cepyme que aprecian cómo ha disminuido la alternativa telemática una vez empezado el mes de septiembre. Ya sea en la administración de empresas, gestorías o constructoras, los trabajadores comienzan a regresar a su puesto de trabajo porque en Huesca, “preferimos socializar y trabajar en grupo”, subraya Salvador Cored, representante de Ceos-Cepyme.

A pesar de que en algunos períodos “tuvo su predicamento”, añade, interfiere directamente con la vida familiar, trabajando desde la misma mesa del comedor o desde un despacho, y a la gran mayoría les resulta más cómodo ir a su lugar de trabajo, completa. Esta opción, escogida por muchos trabajadores, requería la disponibilidad de ordenadores y programas remotos, y para sectores como el comercio, la hostelería o el turismo les era imposible adaptarse.

Pero ha sido “uno de los grandes avances” para acelerar el proceso de cambio laboral, advierte. “Porque el teletrabajo no es más que una manera de ejercer tu profesión”, indica, y en casos de cuidados familiares o urgencias, es una opción a tener en cuenta. En los próximos años, esta semipresencialidad o modelo mixto seguirá escalando como un modelo productivo fructífero.

Luces y sombras

Aunque ha tenido sus “luces y sombras”, remarcan desde UGT. El teletrabajo ha generado sobrecostes en los hogares, problemas de excesiva fiscalización por parte de las empresas, es decir, un control exhaustivo sobre el trabajador, y ahondando aún más en este aspecto, un desorden generalizado de la jornada laboral, algo que Carlos Villacampa, representante de UGT en la provincia, cree que “debería regularse urgentemente”.

El secretario territorial de UGT ha percibido que muchos trabajadores valoraban la relación humana con sus compañeros y no han conseguido adaptarse a la vía telemática. “Si se hiperindividualizan las relaciones de trabajo, la plantilla corre el riesgo de fragmentarse. Los trabajadores tienen que estar unidos para producir conjuntamente y defender sus intereses. Uno a uno somos débiles ante el empresario”, completa.

La combinación entre la presencialidad y el teletrabajo no tiene cabida para el sindicato sin una negociación colectiva y posterior regularización aunque, “es sin duda una de las alternativas del futuro laboral venidero”, concluye el representante de la Unión General de Trabajadores.